Sosegué mi alma hasta la mañana. Como león, El rompe todos mis huesos; Del día a la noche, acabas conmigo.
(Isaías 38:13)Como una golondrina, como una grulla, así me quejo, Gimo como una paloma. Mis ojos miran ansiosamente a las alturas. Oh Señor, estoy oprimido, sé Tú mi ayudador.
(Isaías 38:14)¿Qué diré? Pues El me ha hablado y El mismo lo ha hecho. Andaré errante todos mis años a causa de la amargura de mi alma.
(Isaías 38:15)Oh Señor, por estas cosas viven los hombres , Y en todas ellas está la vida de mi espíritu. Restabléceme la salud y haz que viva.
Por causa de mi bienestar tuve gran amargura. Eres Tú quien ha guardado mi alma del abismo de la nada, Porque echaste tras Tus espaldas todos mis pecados.
(Isaías 38:17)Pues el Seol no Te expresa gratitud, Ni la muerte Te alaba. Los que descienden a la fosa no pueden esperar Tu fidelidad (verdad).
(Isaías 38:18)El que vive, el que vive es el que Te da gracias, como yo lo hago hoy. El padre cuenta a sus hijos Tu fidelidad.
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Isaías 38:16 - Referencia Cruzada
Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación,
(2 Corintios 4:17)Porque ellos nos disciplinaban por pocos días como les parecía, pero El nos disciplina para nuestro bien, para que participemos de Su santidad.
(Hebreos 12:10)El hombre es castigado también con dolor en su lecho, Y con queja continua en sus huesos,
(Job 33:19)El te humilló, y te dejó tener hambre, y te alimentó con el maná que tú no conocías, ni tus padres habían conocido, para hacerte entender que el hombre no sólo vive de pan, sino que vive de todo lo que procede de la boca del SEÑOR.
(Deuteronomio 8:3)Pero Jesús le respondió: "Escrito está: 'NO SOLO DE PAN VIVIRA EL HOMBRE, SINO DE TODA PALABRA QUE SALE DE LA BOCA DE DIOS.'"
(Mateo 4:4)Pero cuando somos juzgados, el Señor nos disciplina para que no seamos condenados con el mundo.
(1 Corintios 11:32)Tú que me has hecho ver muchas angustias y aflicciones, Me volverás a dar vida, Y me levantarás de nuevo de las profundidades de la tierra.
(Salmos 71:20)Dálet. Postrada está mi alma en el polvo; Vivifícame conforme a Tu palabra.
(Salmos 119:25)Sales al encuentro del que se regocija en practicar la justicia, De los que se acuerdan de Ti en Tus caminos. Pero Te enojaste porque pecamos; Continuamos en los pecados por mucho tiempo, ¿Y seremos salvos?
(Isaías 64:5)