También esto llegué a ver como sabiduría bajo el sol, y me impresionó:
(Eclesiastés 9:13)Había una pequeña ciudad con pocos hombres en ella. Llegó un gran rey, la cercó y construyó contra ella grandes baluartes.
(Eclesiastés 9:14)Pero en ella se hallaba un hombre pobre y sabio; y él con su sabiduría libró la ciudad; sin embargo, nadie se acordó de aquel hombre pobre.
(Eclesiastés 9:15)Y yo me dije: "Mejor es la sabiduría que la fuerza." Pero la sabiduría del pobre se desprecia Y no se presta atención a sus palabras.
Las palabras del sabio oídas en quietud son mejores Que los gritos del gobernante entre los necios.
(Eclesiastés 9:17)Mejor es la sabiduría que las armas de guerra, Pero un solo pecador destruye mucho bien.
(Eclesiastés 9:18)Las moscas muertas hacen que el ungüento del perfumista dé mal olor; Un poco de insensatez pesa más que la sabiduría y el honor.
(Eclesiastés 10:1)Otras publicaciones relacionadas con "Eclesiastés 9:16":
Eclesiastés 9:16 - Referencia Cruzada
Mejor es la sabiduría que las armas de guerra, Pero un solo pecador destruye mucho bien.
(Eclesiastés 9:18)Pues consideren, hermanos, su llamamiento. No hubo muchos sabios conforme a la carne (normas humanas), ni muchos poderosos, ni muchos nobles.
(1 Corintios 1:26)El sabio escala la ciudad de los poderosos Y derriba la fortaleza en que confiaban.
(Proverbios 21:22)La fortuna del rico es su fortaleza, La ruina de los pobres es su pobreza.
(Proverbios 10:15)El hombre sabio es fuerte, Y el hombre de conocimiento aumenta su poder.
(Proverbios 24:5)Cuando llegó el día de reposo, comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos que escuchaban se asombraban, diciendo: "¿Dónde obtuvo Este tales cosas, y cuál es esta sabiduría que Le ha sido dada, y estos milagros que hace con Sus manos?
(Marcus 6:2)Por segunda vez los Judíos llamaron al hombre que había sido ciego y le dijeron: "Da gloria a Dios; nosotros sabemos que este hombre es un pecador."
(Juan 9:24)Entonces los Fariseos les contestaron: "¿Es que también ustedes se han dejado engañar?
(Juan 7:47)Porque si en su congregación entra un hombre con anillo de oro y vestido de ropa lujosa, y también entra un pobre con ropa sucia (andrajosa),
(Santiago 2:2)La sabiduría hace más fuerte al sabio Que diez gobernantes que haya en una ciudad.
(Eclesiastés 7:19)