Nueva Biblia Latinoamericana
Había un hombre solo, sin sucesor, Que no tenía hijo ni hermano, Sin embargo, no había fin a todo su trabajo. En verdad, sus ojos no se saciaban de las riquezas, Y nunca se preguntó: "¿Para quién trabajo yo Y privo a mi vida del placer?" También esto es vanidad y tarea penosa. (Eclesiastés 4:8)
Más valen dos que uno solo, Pues tienen mejor pago por su trabajo. (Eclesiastés 4:9)
Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero; Pero ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante! (Eclesiastés 4:10)
Además, si dos se acuestan juntos se mantienen calientes, Pero uno solo ¿cómo se calentará?
Y si alguien puede prevalecer contra el que está solo, Dos lo resistirán. Un cordel de tres hilos no se rompe fácilmente. (Eclesiastés 4:12)
Mejor es un joven pobre y sabio Que un rey viejo y necio, Que ya no sabe recibir consejos (instrucción). (Eclesiastés 4:13)
Porque ha salido de la cárcel para reinar, Aunque nació pobre en su reino. (Eclesiastés 4:14)

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Eclesiastés 4:11 - Referencia Cruzada

El rey David ya era muy anciano, entrado en días; lo cubrían de ropas pero no entraba en calor. (1 Reyes 1:1)