No seas sabio a tus propios ojos; Teme (Reverencia) al SEÑOR y apártate del mal.
(Proverbios 3:7)Será medicina para tu cuerpo Y alivio para tus huesos.
(Proverbios 3:8)Honra al SEÑOR con tus bienes Y con las primicias de todos tus frutos;
(Proverbios 3:9)Entonces tus graneros se llenarán con abundancia Y tus lagares rebosarán de vino nuevo.
Hijo mío, no rechaces la disciplina del SEÑOR Ni aborrezcas Su reprensión,
(Proverbios 3:11)Porque el SEÑOR ama a quien reprende, Como un padre al hijo en quien se deleita.
(Proverbios 3:12)Bienaventurado el hombre que halla sabiduría Y el hombre que adquiere entendimiento.
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Proverbios 3:10 - Referencia Cruzada
¿Está todavía la semilla en el granero? Todavía la vid, la higuera, el granado y el olivo no han dado fruto; pero desde hoy Yo los bendeciré.'"
(Hageo 2:19)Traigan todo el diezmo al alfolí, para que haya alimento en Mi casa; y pónganme ahora a prueba en esto;" dice el SEÑOR de los ejércitos "si no les abro las ventanas de los cielos, y derramo para ustedes bendición hasta que sobreabunde.
(Malaquías 3:10)Guardarán Mis días de reposo, y tendrán en reverencia Mi santuario. Yo soy el SEÑOR.
(Levítico 26:2)Pero esto digo: el que siembra escasamente, escasamente también segará; y el que siembra abundantemente (con bendiciones), abundantemente (con bendiciones) también segará.
(2 Corintios 9:6)Y las eras se llenarán de grano, Y las tinajas rebosarán de vino nuevo y de aceite virgen.
(Joel 2:24)El que se apiada del pobre presta al SEÑOR, Y El lo recompensará por su buena obra.
(Proverbios 19:17)Hay quien reparte, y le es añadido más, Y hay quien retiene lo que es justo, sólo para venir a menos.
(Proverbios 11:24)Echa tu pan sobre las aguas, Que después de muchos días lo hallarás.
(Eclesiastés 11:1)Y cualquiera que como discípulo dé a beber aunque sólo sea un vaso de agua fría a uno de estos pequeños, en verdad les digo que no perderá su recompensa."
(Mateo 10:42)El SEÑOR mandará que la bendición sea contigo en tus graneros y en todo aquello en que pongas tu mano, y te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da.
(Deuteronomio 28:8)