Nueva Biblia Latinoamericana
Cántico de ascenso gradual; de Salomón. Si el SEÑOR no edifica la casa, En vano trabajan los que la edifican; Si el SEÑOR no guarda la ciudad, En vano vela la guardia. (Salmos 127:1)
Es en vano que se levanten de madrugada, Que se acuesten tarde, Que coman el pan de afanosa labor, Pues El da a Su amado aun mientras duerme. (Salmos 127:2)
Un don del SEÑOR son los hijos, Y recompensa es el fruto del vientre. (Salmos 127:3)
Como flechas en la mano del guerrero, Así son los hijos tenidos en la juventud.
Bienaventurado el hombre que de ellos tiene llena su aljaba; No será avergonzado Cuando hable con sus enemigos en la puerta. (Salmos 127:5)
Cántico de ascenso gradual. Bienaventurado todo aquél que teme al SEÑOR, Que anda en Sus caminos. (Salmos 128:1)
Cuando comas del trabajo de tus manos, Dichoso serás y te irá bien. (Salmos 128:2)

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Salmos 127:4 - Referencia Cruzada

Agudas flechas de guerrero, Con brasas de enebro. (Salmos 120:4)
Porque Yo hago despertar y subir contra Babilonia Una horda de grandes naciones de la tierra del norte, Que se alinearán para la batalla contra ella; Desde allí será llevada cautiva. Sus flechas serán como de diestro guerrero Que no vuelve con las manos vacías. (Jeremías 50:9)
Corona de los ancianos son los nietos, Y la gloria de los hijos son sus padres. (Proverbios 17:6)
Sus hijos se levantan y la llaman bienaventurada, También su marido, y la alaba diciendo: (Proverbios 31:28)