Nueva Biblia Latinoamericana
Se sienta al acecho en las aldeas, En los escondrijos mata al inocente; Sus ojos espían al desvalido. (Salmos 10:8)
Acecha en el escondrijo como león en su guarida; Acecha para atrapar al afligido, Y atrapa al afligido arrastrándolo a su red. (Salmos 10:9)
Se agazapa, se encoge, Y los desdichados caen en sus garras. (Salmos 10:10)
El impío dice en su corazón: "Dios se ha olvidado; Ha escondido Su rostro; nunca verá nada."
Levántate, oh SEÑOR; alza, oh Dios, Tu mano. No Te olvides de los pobres. (Salmos 10:12)
¿Por qué ha despreciado el impío a Dios? Ha dicho en su corazón: "Tú no le pedirás cuentas." (Salmos 10:13)
Tú lo has visto, porque has contemplado la malicia y el maltrato, para hacer justicia con Tu mano. A Ti se acoge el desvalido; Tú has sido amparo del huérfano. (Salmos 10:14)

Otras publicaciones relacionadas con "Salmos 10:11":

Dr. Roberto Miranda
El Señor atiende al humilde pero mira de lejos al altivo
Reflexión sobre Lucas 8: la importancia de la humildad ante Dios y cómo la actitud del corazón es lo que mueve el corazón de Dios.


Nancy G. Marquez
Amparados bajo la sombra de Dios
Artículo sobre cómo encontrar refugio en Dios en momentos de dificultad, basado en el salmo 91:1 y la experiencia del salmista David. Escrito por Nancy G. Marquez.


Salmos 10:11 - Referencia Cruzada

Y dicen: "El SEÑOR no ve nada Ni hace caso el Dios de Jacob." (Salmos 94:7)
Entonces Dios me dijo: "Hijo de hombre, ¿has visto lo que hacen en la oscuridad los ancianos de la casa de Israel, cada uno en su cámara de imágenes grabadas? Porque ellos dicen: 'El SEÑOR no nos ve; el SEÑOR ha abandonado la tierra.'" (Ezequiel 8:12)
Porque la sentencia contra una mala obra no se ejecuta enseguida, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos entregado enteramente a hacer el mal. (Eclesiastés 8:11)
Y tú dices: '¿Qué sabe Dios? ¿Puede El juzgar a través de las densas tinieblas? (Job 22:13)
Se aferran en propósitos malignos; Hablan de tender trampas en secreto, Y dicen: "¿Quién las verá?" (Salmos 64:5)
Entonces el SEÑOR me respondió: "La iniquidad de la casa de Israel y de Judá es grande en extremo, la tierra está llena de sangre y la ciudad está llena de perversión; porque dicen: 'El SEÑOR ha abandonado la tierra, el SEÑOR nada ve.' (Ezequiel 9:9)
Pero estaban allí sentados algunos de los escribas, los cuales pensaban en sus corazones: (Marcus 2:6)
Y dicen: "¿Cómo lo sabe Dios? ¿Hay conocimiento en el Altísimo?" (Salmos 73:11)
Pero al ver esto el Fariseo que Lo había invitado, dijo para sí: "Si Este fuera un profeta, sabría quién y qué clase de mujer es la que Lo está tocando, que es una pecadora." (Lucas 7:39)
Dice en su corazón: "No hay quien me mueva; Por todas las generaciones no sufriré adversidad." (Salmos 10:6)