Nueva Biblia Latinoamericana
Como su propio estiércol perece para siempre; Los que lo han visto dirán: '¿Dónde está?' (Job 20:7)
Huye como un sueño, y no lo pueden encontrar, Y como visión nocturna es ahuyentado. (Job 20:8)
El ojo que lo veía, ya no lo ve, Y su lugar no lo contempla más. (Job 20:9)
Sus hijos favorecen a los pobres, Y sus manos devuelven sus riquezas.
Sus huesos están llenos de vigor juvenil, Pero yacen con él en el polvo. (Job 20:11)
Aunque el mal sea dulce en su boca, Y lo oculte bajo su lengua, (Job 20:12)
aunque lo desee y no lo deje ir, Sino que lo retenga en su paladar, (Job 20:13)

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Job 20:10 - Referencia Cruzada

Vaguen errantes sus hijos, y mendiguen, Y busquen el sustento lejos de sus hogares en ruinas. (Salmos 109:10)
Aunque amontone plata como polvo, Y prepare vestidos abundantes como el barro; (Job 27:16)
Porque si te niegas a dejarlos ir y los sigues deteniendo, (Éxodo 9:2)
Y el SEÑOR hizo que el pueblo se ganara el favor de los Egipcios, que les concedieron lo que pedían. Así despojaron a los Egipcios. (Éxodo 12:36)
Devuelve lo que ha ganado, No lo puede tragar; En cuanto a las riquezas de su comercio, No las puede disfrutar. (Job 20:18)
y debe pagar cuatro veces por la cordera, porque hizo esto y no tuvo compasión." (2 Samuel 12:6)
Si alguien roba un buey o una oveja, y lo mata o vende, pagará cinco bueyes por el buey y cuatro ovejas por la oveja. (Éxodo 22:1)
Pero si ya ha salido el sol, será considerado homicidio. Ciertamente, el que roba debe hacer restitución. Si no tiene con qué, entonces será vendido por el valor de su robo. (Éxodo 22:3)
Sus hijos no tienen seguridad alguna, Aun en la puerta (de la ciudad) son oprimidos, Y no hay quien los libre. (Job 5:4)
Pero cuando es sorprendido, debe pagar siete veces; Tiene que dar todos los bienes de su casa. (Proverbios 6:31)
El pobre que oprime a los humildes Es como lluvia torrencial que no deja pan. (Proverbios 28:3)
Pero Zaqueo, puesto en pie, dijo a Jesús: "Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado a alguien, se lo restituiré cuadruplicado." (Lucas 19:8)