Aunque su orgullo llegue a los cielos, Y su cabeza toque las nubes,
(Job 20:6)
Como su propio estiércol perece para siempre; Los que lo han visto dirán: '¿Dónde está?'
(Job 20:7)
Huye como un sueño, y no lo pueden encontrar, Y como visión nocturna es ahuyentado.
(Job 20:8)
El ojo que lo veía, ya no lo ve, Y su lugar no lo contempla más.
Sus hijos favorecen a los pobres, Y sus manos devuelven sus riquezas.
(Job 20:10)
Sus huesos están llenos de vigor juvenil, Pero yacen con él en el polvo.
(Job 20:11)
Aunque el mal sea dulce en su boca, Y lo oculte bajo su lengua,
(Job 20:12)
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Job 20:9 - Referencia Cruzada
Como su propio estiércol perece para siempre; Los que lo han visto dirán: '¿Dónde está?'
(Job 20:7)
El hombre, como la hierba son sus días; Como la flor del campo, así florece;
(Salmos 103:15)
Un poco más y no existirá el impío; Buscarás con cuidado su lugar, pero él no estará allí .
(Salmos 37:10)
Porque mientras haya vida en mí, Y el aliento de Dios esté en mis narices,
(Job 27:3)
El ojo del que me ve no me verá más; Tus ojos estarán sobre mí, pero yo no existiré.
(Job 7:8)
No volverá más a su casa, Ni su lugar lo verá más.
(Job 7:10)
Luego pasó, y ya no estaba; Lo busqué, pero no se pudo encontrar.
(Salmos 37:36)
Si lo arrancan de su lugar, Este le negará, diciendo: 'Nunca te vi.'
(Job 8:18)