Cuando me acuesto, digo: '¿Cuándo me levantaré?' Pero la noche sigue, Y estoy dando vueltas continuamente hasta el amanecer.
(Job 7:4)
Mi carne está cubierta de gusanos y de una costra de tierra; Mi piel se endurece y supura.
(Job 7:5)
Mis días pasan más veloces que la lanzadera de telar, Y llegan a su fin sin esperanza.
(Job 7:6)
Recuerda, oh Dios, que mi vida es un soplo, Mis ojos no volverán a ver el bien.
El ojo del que me ve no me verá más; Tus ojos estarán sobre mí, pero yo no existiré.
(Job 7:8)
Como una nube se desvanece y pasa, Así el que desciende al Seol (región de los muertos) no subirá;
(Job 7:9)
No volverá más a su casa, Ni su lugar lo verá más.
(Job 7:10)
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Job 7:7 - Referencia Cruzada
Acuérdate ahora que me has modelado como a barro, ¿Y me harás volver al polvo?
(Job 10:9)
Sin embargo, ustedes no saben cómo será su vida mañana. Sólo son un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece.
(Santiago 4:14)
Recuerda, Señor, el oprobio de Tus siervos; Cómo llevo dentro de mí el oprobio de muchos pueblos,
(Salmos 89:50)
Antes que me vaya, para no volver, A la tierra de tinieblas y de sombras profundas;
(Job 10:21)
Y su padre Jacob les dijo: "Ustedes me han privado de mis hijos; José ya no existe, y Simeón ya no existe, y ahora se quieren llevar a Benjamín. Todas estas cosas son contra mí."
(Génesis 42:36)
Se acordaba de que ellos eran carne, Un soplo que pasa y no vuelve.
(Salmos 78:39)
Acuérdate ahora de la palabra que ordenaste a Tu siervo Moisés: 'Si ustedes son infieles, Yo los dispersaré entre los pueblos;
(Nehemías 1:8)
Tú que lo sabes, oh SEÑOR, Acuérdate de mí, atiéndeme, Y véngame de mis perseguidores. Conforme a Tu paciencia, no dejes que sea yo arrebatado; Sabes que por Ti sufro oprobio.
(Jeremías 15:15)
Mis días son más ligeros que un corredor; Huyen, no ven el bien;
(Job 9:25)
Recuerda cuán breve es mi vida; ¡Con qué propósito vano has creado a todos los hijos de los hombres!
(Salmos 89:47)
Acuérdate de esto, SEÑOR: que el enemigo ha blasfemado, Y que un pueblo insensato ha despreciado Tu nombre.
(Salmos 74:18)
Levántate, oh Dios, defiende Tu causa; Acuérdate de cómo el necio Te injuria todo el día.
(Salmos 74:22)