Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces se sentaron en el suelo con él por siete días y siete noches sin que nadie le dijera una palabra, porque veían que su dolor era muy grande. (Job 2:13)
Después de esto, Job abrió su boca y maldijo el día de su nacimiento. (Job 3:1)
Y dijo Job: (Job 3:2)
Perezca el día en que yo nací, Y la noche que dijo: 'Un varón ha sido concebido.'
Sea ese día tinieblas, No lo tome en cuenta Dios desde lo alto, Ni resplandezca sobre él la luz. (Job 3:4)
Apodérense de él tinieblas y densa oscuridad, Pósese sobre él una nube, Llénelo de terror la negrura del día. (Job 3:5)
Y en cuanto a aquella noche, apodérense de ella las tinieblas; Que no se alegre entre los días del año, Ni se cuente en el número de los meses. (Job 3:6)

Otras publicaciones relacionadas con "Job 3:3":

Dr. Roberto Miranda
Espera al Señor pacientemente
Aprende a esperar pacientemente en Dios y mantener tu fe y confianza en Él, a pesar de las pruebas y dificultades que enfrentes. Sé fiel a Él y otros verán tu testimonio y confiarán en Dios.


Dr. Roberto Miranda
Una declaración audaz
Artículo sobre cómo mantener la fe en Dios a pesar de las pruebas, basado en el libro de Job y su declaración audaz de que su Redentor vive.


Job 3:3 - Referencia Cruzada

¿Por qué, pues, me sacaste de la matriz? ¡Ojalá que hubiera muerto y nadie me hubiera visto! (Job 10:18)
Maldito el día en que nací; El día en que mi madre me dio a luz no sea bendito. (Jeremías 20:14)
¡Ay de mí, madre mía, porque me diste a luz Como hombre de contienda y hombre de discordia para toda la tierra! No he prestado ni me han prestado, Sin embargo todos me maldicen. (Jeremías 15:10)