Nueva Biblia Latinoamericana
Ellos, sin embargo, no sabían que José los entendía, porque había un intérprete entre él y ellos. (Génesis 42:23)
Y se apartó José de su lado y lloró. Cuando volvió a ellos y les habló, tomó de entre ellos a Simeón, y lo ató a la vista de sus hermanos. (Génesis 42:24)
José mandó que les llenaran sus vasijas de grano y que devolvieran el dinero a cada uno poniéndolo en su saco, y que les dieran provisiones para el camino. Y así se hizo con ellos. (Génesis 42:25)
Ellos, pues, cargaron el grano sobre sus asnos, y se fueron de allí.
Y cuando uno de ellos abrió su saco para dar forraje a su asno en la posada, vio que su dinero estaba en la boca de su costal. (Génesis 42:27)
Entonces dijo a sus hermanos: "Me ha sido devuelto mi dinero, y miren, está en mi costal." Y se les sobresaltó el corazón, y temblando se decían el uno al otro: "¿Qué es esto que Dios nos ha hecho?" (Génesis 42:28)
Cuando llegaron a su padre Jacob en la tierra de Canaán, le contaron todo lo que les había sucedido: (Génesis 42:29)

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Génesis 42:26 - Referencia Cruzada