Y subió el rey a la casa del SEÑOR con todos los hombres de Judá, los habitantes de Jerusalén, los sacerdotes, los Levitas y todo el pueblo, desde el mayor hasta el menor, y leyó en su presencia todas las palabras del Libro del Pacto que había sido hallado en la casa del SEÑOR.
(2 Crónicas 34:30)Después el rey se puso en pie en su lugar e hizo pacto delante del SEÑOR de andar en pos del SEÑOR y de guardar Sus mandamientos, Sus testimonios y Sus estatutos con todo su corazón y con toda su alma, para cumplir las palabras del pacto escritas en este libro.
(2 Crónicas 34:31)Además, hizo suscribir el pacto a todos los que se encontraban en Jerusalén y en Benjamín. Y los habitantes de Jerusalén hicieron conforme al pacto de Dios, el Dios de sus padres.
(2 Crónicas 34:32)Y Josías quitó todas las abominaciones de todas las tierras que pertenecían a los Israelitas, e hizo que todos los que se encontraban en Israel sirvieran al SEÑOR su Dios. Mientras él vivió no se apartaron de seguir al SEÑOR, Dios de sus padres.
Entonces Josías celebró la Pascua al SEÑOR en Jerusalén, y mataron los animales de la Pascua el día catorce del mes primero.
(2 Crónicas 35:1)Y puso a los sacerdotes en sus oficios y los animó al servicio de la casa del SEÑOR.
(2 Crónicas 35:2)También dijo a los Levitas que enseñaban a todo Israel y que estaban consagrados al SEÑOR: "Pongan el arca santa en la casa que edificó Salomón, hijo de David, rey de Israel. No será más una carga sobre sus hombros. Ahora sirvan al SEÑOR su Dios y a Su pueblo Israel.
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2 Crónicas 34:33 - Referencia Cruzada
Porque en el octavo año de su reinado, siendo aún joven, comenzó a buscar al Dios de su padre David; y en el año doce empezó a purificar a Judá y a Jerusalén de los lugares altos, de las Aseras, de las imágenes talladas y de las imágenes fundidas.
(2 Crónicas 34:3)A pesar de todo esto, su rebelde hermana Judá tampoco se volvió a Mí de todo corazón, sino con engaño," declara el SEÑOR.
(Jeremías 3:10)¿Qué haré contigo, Efraín? ¿Qué haré contigo, Judá? Porque la lealtad (misericordia) de ustedes es como nube matinal, Y como el rocío, que temprano desaparece.
(Oseas 6:4)Después el rey ordenó que el sumo sacerdote Hilcías y los sacerdotes de segundo orden y los guardianes del umbral, sacaran del templo del SEÑOR todas las vasijas que se habían hecho para Baal, para la Asera (deidad femenina) y para todo el ejército de los cielos, y los quemó fuera de Jerusalén en los campos del Cedrón y llevó sus cenizas a Betel (Casa de Dios).
(2 Reyes 23:4)Israel sirvió al SEÑOR todos los días de Josué y todos los días de los ancianos que sobrevivieron a Josué y que habían conocido todas las obras que el SEÑOR había hecho por Israel.
(Josué 24:31)Porque Salomón siguió a Astoret, diosa de los Sidonios, y a Milcom, ídolo abominable de los Amonitas.
(1 Reyes 11:5)