Para cada mesa, le dio el oro por peso para las mesas de los panes de la proposición, y la plata para las mesas de plata;
(1 Crónicas 28:16)y los garfios, los tazones, y los jarros de oro puro; y para las tazas de oro con el peso de cada taza; y para las tazas de plata con el peso de cada taza;
(1 Crónicas 28:17)y oro acrisolado por peso para el altar del incienso; y oro para el diseño del carro, es decir, de los querubines, que extendían sus alas y cubrían el arca del pacto del SEÑOR.
(1 Crónicas 28:18)Todo esto,^ dijo David, "me fue trazado por mano del SEÑOR, haciéndome entender todos los detalles del diseño."
Entonces David dijo a su hijo Salomón: "Esfuérzate, sé valiente y haz la obra; no temas ni te acobardes, porque el SEÑOR Dios, mi Dios, está contigo. El no te fallará ni te abandonará, hasta que toda la obra del servicio de la casa del SEÑOR sea acabada.
(1 Crónicas 28:20)Y tú tienes las clases de los sacerdotes y los Levitas para todo el servicio de la casa de Dios; y todo voluntario con alguna habilidad estará contigo en toda la obra para toda clase de servicio. También los oficiales y todo el pueblo estarán completamente a tus órdenes."
(1 Crónicas 28:21)Entonces el rey David dijo a toda la asamblea: "Mi hijo Salomón, el único que Dios ha escogido, es aún joven y sin experiencia, y la obra es grande; porque el templo no es para hombre, sino para el SEÑOR Dios.
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1 Crónicas 28:19 - Referencia Cruzada
La mano del SEÑOR vino allí sobre mí, y El me dijo: "Levántate, ve a la llanura, y allí te hablaré."
(Ezequiel 3:22)Mira que los hagas según el diseño que te ha sido mostrado en el monte.
(Éxodo 25:40)Entonces David dio a su hijo Salomón el plano del pórtico del templo, de sus edificios, almacenes, aposentos altos, cámaras interiores y del lugar del propiciatorio.
(1 Crónicas 28:11)la palabra del SEÑOR fue dirigida al sacerdote Ezequiel, hijo de Buzi, en la tierra de los Caldeos junto al río Quebar, y allí vino sobre él la mano del SEÑOR.)
(Ezequiel 1:3)El Espíritu me levantó y me tomó; yo iba con amargura en la indignación de mi espíritu, y la mano del SEÑOR era fuerte sobre mí.
(Ezequiel 3:14)Entonces levantarás el tabernáculo según el plan que te ha sido mostrado en el monte.
(Éxodo 26:30)