Israel amaba a José más que a todos sus hijos, porque era para él el hijo de su vejez; y le hizo una túnica de muchos colores.
(Génesis 37:3)Y sus hermanos vieron que su padre amaba más a José que a todos ellos; por eso lo odiaban y no podían hablarle amistosamente.
(Génesis 37:4)José tuvo un sueño y cuando se lo contó a sus hermanos, ellos lo odiaron aún más.
(Génesis 37:5)Y él les dijo: "Les ruego que escuchen este sueño que he tenido.
Estábamos atando gavillas en medio del campo, y sucedió que mi gavilla se levantó y se puso derecha, y entonces las gavillas de ustedes se ponían alrededor y se inclinaban hacia mi gavilla."
(Génesis 37:7)Y sus hermanos le dijeron: "¿Acaso reinarás sobre nosotros? ¿O acaso te enseñorearás sobre nosotros?" Y lo odiaron aún más por causa de sus sueños y de sus palabras.
(Génesis 37:8)José tuvo también otro sueño, y se lo contó a sus hermanos, diciendo: "He tenido otro sueño; y el sol, la luna y once estrellas se inclinaban ante mí."
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Génesis 37:6 - Referencia Cruzada
Entonces Judá se le acercó, y dijo: "Oh señor mío, permita a su siervo hablar una palabra a los oídos de mi señor, y que no se encienda su ira contra su siervo, pues usted es como Faraón mismo.
(Génesis 44:18)Cuando se lo informaron a Jotam, fue y se paró en la cumbre del Monte Gerizim, y alzando su voz, clamó y les dijo: "Escúchenme, habitantes de Siquem, para que los oiga Dios.
(Jueces 9:7)