No seáis ignorantes acerca de los dones espirituales
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: El mensaje de 1 Corintios 12:1 es un llamado del Espíritu Santo para que el pueblo de Dios no sea ignorante acerca de las cosas del espíritu. La palabra griega "neumáticon" se traduce como "dones espirituales", pero se refiere a las cosas y asuntos del espíritu en general. Pablo quería corregir la falta de entendimiento y la simpleza en la iglesia de Corinto, y Dios quiere que estemos bien informados y educados acerca de las diferentes manifestaciones del Espíritu Santo. Aunque es importante tener dones del Espíritu, también es esencial tener el fruto del Espíritu, como el amor, la paciencia y la bondad, y buscar un equilibrio en todas las cosas.
En resumen, al predicar acerca de los dones del Espíritu Santo, es importante tener en cuenta el contexto colectivo de la reunión y no ofender o escandalizar a los asistentes. Hay una línea fina entre contristar al Espíritu Santo y mantener el orden que conviene a la manifestación del Espíritu Santo. Es importante discernir el cuerpo y respetar la privacidad y dignidad de las personas en el momento de manifestaciones del Espíritu Santo. Hay que tener conocimiento y madurez espiritual en las complejidades del Espíritu Santo, como la guerra espiritual. Busquemos una vida de poder en el Espíritu Santo.
La guerra espiritual es un área importante de la vida cristiana, y es necesario conocer y entender sus complejidades. Es importante discernir entre aflicciones emocionales y mentales y aflicciones espirituales, y saber cómo luchar contra ellas usando armas espirituales como el ayuno y la oración. Los dones del Espíritu Santo, como la profecía y el don de consejería, son también importantes en nuestra vida cristiana y pueden ser activados a través de una vida de disciplina espiritual y apertura a la manifestación del poder de Dios. En resumen, debemos mantener una vida sobrenatural y estar abiertos a la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas.
Este sermón se trata de la importancia de cultivar los dones del Espíritu Santo. Si estamos abiertos a ellos y vivimos una vida en expectativa sana, podemos recibirlos cuando Dios quiera manifestarse. También es importante no contristar al Espíritu Santo, lo que puede ocurrir de muchas maneras, como con un espíritu vengativo, vida impura, orgullo, incredulidad, etc. La gratitud y el gozo son armas espirituales que debemos cultivar, y no debemos apagar el Espíritu Santo ni menospreciar las profecías. Debemos examinar todo y retener lo bueno. Finalmente, debemos buscar más del Espíritu Santo y pedirle que se manifieste más en nuestras vidas como congregación.
En resumen, al predicar acerca de los dones del Espíritu Santo, es importante tener en cuenta el contexto colectivo de la reunión y no ofender o escandalizar a los asistentes. Hay una línea fina entre contristar al Espíritu Santo y mantener el orden que conviene a la manifestación del Espíritu Santo. Es importante discernir el cuerpo y respetar la privacidad y dignidad de las personas en el momento de manifestaciones del Espíritu Santo. Hay que tener conocimiento y madurez espiritual en las complejidades del Espíritu Santo, como la guerra espiritual. Busquemos una vida de poder en el Espíritu Santo.
La guerra espiritual es un área importante de la vida cristiana, y es necesario conocer y entender sus complejidades. Es importante discernir entre aflicciones emocionales y mentales y aflicciones espirituales, y saber cómo luchar contra ellas usando armas espirituales como el ayuno y la oración. Los dones del Espíritu Santo, como la profecía y el don de consejería, son también importantes en nuestra vida cristiana y pueden ser activados a través de una vida de disciplina espiritual y apertura a la manifestación del poder de Dios. En resumen, debemos mantener una vida sobrenatural y estar abiertos a la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas.
Este sermón se trata de la importancia de cultivar los dones del Espíritu Santo. Si estamos abiertos a ellos y vivimos una vida en expectativa sana, podemos recibirlos cuando Dios quiera manifestarse. También es importante no contristar al Espíritu Santo, lo que puede ocurrir de muchas maneras, como con un espíritu vengativo, vida impura, orgullo, incredulidad, etc. La gratitud y el gozo son armas espirituales que debemos cultivar, y no debemos apagar el Espíritu Santo ni menospreciar las profecías. Debemos examinar todo y retener lo bueno. Finalmente, debemos buscar más del Espíritu Santo y pedirle que se manifieste más en nuestras vidas como congregación.
Primera de Corintios, capítulo 12, versículo 1. Quiero dejar un versículo solamente en su mente y le pido ahora al Señor que renueve este pasaje en mi espíritu para que lo pueda predicar como si fuera la primera vez en este día, aunque lo prediqué esta mañana en inglés. Es un llamado, una advertencia, un reto, una invitación de parte del Espíritu Santo al pueblo de Dios, dice:
“No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales.”
“No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales.”
