Conócete a ti mismo
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En la Epístola de Santiago encontramos consejos prácticos sobre la vida cristiana y el comportamiento adecuado. La prueba y el sufrimiento son parte de la vida, pero Dios los usa para bien si los enfrentamos con fe. También se habla de la tentación, que es cuando sentimos una inclinación hacia algo que es contrario a la voluntad de Dios. La tentación es interna y generalmente se da en la mente o en el corazón. Dios no tienta a nadie, pero Satanás sí lo hace. La tentación surge de nuestros propios deseos fuertes o apetitos, como el amor al dinero o la avaricia. La concupiscencia es cualquier sensación fuerte, deseo o inclinación. La tentación es dañina y destructiva, y nos aleja de Dios. Debemos resistirla y no culpar a Dios por ella.
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de conocerse a uno mismo y reconocer nuestras debilidades y tentaciones. Afirma que Satanás estudia a las personas para encontrar sus áreas de vulnerabilidad y usarlas para llevarlos al pecado y la destrucción. También explica el concepto de epitumía, que es el deseo intenso por algo que puede llevar a una persona a pecar. El pastor anima a los oyentes a pedir ayuda a Dios para ganar el control de sus apetitos y actitudes negativas, y a mantenerse alerta para no caer en la tentación.
Las tentaciones son comunes en la vida humana y no desaparecerán, pero podemos mantenerlas bajo control con la ayuda del Espíritu Santo. Debemos examinar nuestras debilidades y defectos para mantenerlos bajo control y agradar a Dios. La prueba y las dificultades pueden fortalecernos y darnos una mayor conciencia de nuestras áreas débiles. Debemos estar conscientes de nuestras cicatrices emocionales y trabajar en ellas para glorificar a Dios. En esta radiografía de la tentación, se espera que la reflexión sea de bendición para nuestras vidas. En la oración, se agradece a Dios y se pide descanso y protección para todos.La epístola de Santiago está llena de consejos prácticos acerca de la vida. Santiago salta como de una cosa a la otra porque es como tener un consejero al lado tuyo que te está dando pequeños consejos acerca de la vida. Por eso muchas veces él salta de un tema al otro y uno necesariamente ve cuál es la conexión entre lo que estuvo antes y lo que viene después. Pero sí hay como una coherencia interna que es la coherencia del pastor que le está hablando a su congregación acerca de cosas prácticas de la vida cristiano, del comportamiento cristiano. Claro, todo esto inspirado por el Espíritu Santo porque no es simplemente un hombre escribiendo lo que se le ocurre. Hay en esta epístola, en esta carta una cantidad de verdades y de enseñanzas muy necesarias y muy buenas para la vida.
Ustedes recordarán, los que pudieron venir a una serie de estudios que di, cuando comencé esto hace ya unas cuantas semanas atrás, después han intervenido tantas cosas de por medio, pero estuvimos hablando acerca de las pruebas, ¿recuerdan? De que las pruebas, las dificultades de la vida, los sufrimientos de la vida, los padecimientos, los sinsabores, los reversos de la vida no son necesariamente como algo que no tiene sentido, sino que Dios muchas veces permite estas cosas en nuestra vida para propósitos muy buenos, muy benévolos.