Nueva Biblia Latinoamericana
Así fue que Absalón huyó a Gesur, y estuvo allí tres años. (2 Samuel 13:38)
Y el rey David ansiaba ir adonde estaba Absalón, pues con respecto a Amnón que había muerto, ya se había consolado. (2 Samuel 13:39)
Joab, hijo de Sarvia, comprendió que el corazón del rey se inclinaba hacia Absalón. (2 Samuel 14:1)
Y Joab envió a Tecoa a traer a una mujer sabia de allí, y le dijo: "Te ruego que finjas estar de duelo, te pongas ahora ropas de luto y no te unjas con óleo, sino pórtate como una mujer que por muchos días ha estado de duelo por un muerto;
después ve al rey y háblale de esta manera." Y Joab puso las palabras en su boca. (2 Samuel 14:3)
Cuando la mujer de Tecoa habló al rey, cayó sobre su rostro en tierra, y postrándose, dijo: "¡Ayúdeme, oh rey!" (2 Samuel 14:4)
¿Qué te sucede?" le dijo el rey. Ella le respondió: "Ciertamente soy viuda, pues mi marido ha muerto." (2 Samuel 14:5)

Other publications related to "2 Samuel 14:2":

Sorines López
Presentation Women Building Destinations April 10, 2010: Seven actions of a wise woman
Learn about the seven wise actions of Abigail in 1 Samuel 25 and how they can bring about positive change in our lives. Reflection, giving, wisdom, humility, courage, faith, and grace are key themes in this article by Sorines López.


Mercedes López-Miranda
Women's Ministry Seminar: A Woman of Great Influence
A seminar discussing the story of Abigail and the importance of wisdom, leadership skills, emotional balance, and reputation in being a woman of great influence. Abigail's example teaches us how to positively impact others and make wise decisions in difficult situations.


2 Samuel 14:2 - Cross Reference

Entonces David se levantó del suelo, se lavó, se ungió y se cambió de ropa; entró en la casa del SEÑOR y adoró. Después vino a su casa y cuando pidió, le pusieron comida delante y comió. (2 Samuel 12:20)
Y vino que alegra el corazón del hombre, Para que haga brillar con aceite su rostro, Y alimento que fortalece el corazón del hombre. (Psalm 104:15)
Se levantaron muy de mañana y salieron al desierto de Tecoa. Cuando salían, Josafat se puso en pie y dijo: "Oiganme, Judá y habitantes de Jerusalén, confíen en el SEÑOR su Dios, y estarán seguros. Confíen en Sus profetas y triunfarán." (2 Chronicles 20:20)
¡Huyan, hijos de Benjamín, De en medio de Jerusalén! Toquen trompeta en Tecoa, Y alcen señal sobre Bet Haquerem, Porque desde el norte se asoma el mal Y una gran destrucción. (Jeremiah 6:1)
Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, (Matthew 6:17)
Palabras de Amós, que fue uno de los pastores de Tecoa, de lo que vio en visión acerca de Israel en días de Uzías, rey de Judá, y en días de Jeroboam, hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto. (Amos 1:1)
Al oír la mujer de Urías que su marido Urías había muerto, hizo duelo por su marido. (2 Samuel 11:26)
Así edificó Belén (Casa del Pan), Etam, Tecoa, (2 Chronicles 11:6)
A su lado hicieron también reparaciones los Tecoítas, pero sus nobles no apoyaron la obra de sus señores. (Nehemiah 3:5)
Lávate, pues, perfúmate y ponte tu mejor vestido y baja a la era; pero no te des a conocer al hombre hasta que haya acabado de comer y beber. (Ruth 3:3)
Después de ellos los Tecoítas repararon otra sección frente a la gran torre sobresaliente y hasta el muro de Ofel. (Nehemiah 3:27)
En todo tiempo sean blancas tus ropas, Y que no falte ungüento sobre tu cabeza. (Ecclesiastes 9:8)