Cuando los lleven a las sinagogas y ante los gobernantes y las autoridades, no se preocupen de cómo o de qué hablarán en defensa propia, o qué van a decir;
(Luke 12:11)
porque el Espíritu Santo en esa misma hora les enseñará lo que deben decir."
(Luke 12:12)
Uno de la multitud Le dijo: "Maestro, dile a mi hermano que divida la herencia conmigo."
(Luke 12:13)
¡Hombre!" le dijo Jesús, "¿Quién Me ha puesto por juez o árbitro sobre ustedes?"
También les dijo: "Estén atentos y cuídense de toda forma de avaricia; porque aun cuando alguien tenga abundancia, su vida no consiste en sus bienes."
(Luke 12:15)
Entonces les contó una parábola: "La tierra de cierto hombre rico había producido mucho.
(Luke 12:16)
Y él pensaba dentro de sí: '¿Qué haré, ya que no tengo dónde almacenar mis cosechas?'
(Luke 12:17)
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Luke 12:14 - Cross Reference
El te ha declarado, oh hombre, lo que es bueno. ¿Y qué es lo que demanda el SEÑOR de ti, Sino sólo practicar la justicia (el derecho), amar la misericordia (lealtad), Y andar humildemente con tu Dios?
(Micah 6:8)
¿Y piensas esto, oh hombre, tú que condenas a los que practican tales cosas y haces lo mismo, que escaparás del juicio de Dios?
(Romans 2:3)
¿Quién te ha puesto de príncipe o de juez sobre nosotros?" le respondió el culpable. "¿Estás pensando matarme como mataste al Egipcio?" Entonces Moisés tuvo miedo, y dijo: "Ciertamente se ha divulgado lo sucedido."
(Exodus 2:14)
Por lo cual no tienes excusa, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas, pues al juzgar a otro, a ti mismo te condenas, porque tú que juzgas practicas las mismas cosas.
(Romans 2:1)
Al ver Jesús la fe de ellos, dijo: "Hombre, tus pecados te son perdonados."
(Luke 5:20)
Por lo que Jesús, dándose cuenta de que iban a venir y por la fuerza hacerle rey, se retiró El solo otra vez al monte.
(John 6:15)
Pilato contestó: "¿Acaso soy yo Judío? Tu nación y los principales sacerdotes Te entregaron a mí. ¿Qué has hecho?"
(John 18:35)
Un poco después, otro al verlo, dijo: "¡Tú también eres uno de ellos!" "¡Hombre, no es cierto!" le dijo Pedro.
(Luke 22:58)
Al contrario, ¿quién eres tú, oh hombre, que le contestas a Dios? ¿Dirá acaso el objeto modelado al que lo modela: "Por qué me hiciste así?"
(Romans 9:20)
Ninguno, Señor," respondió ella. Entonces Jesús le dijo: "Yo tampoco te condeno. Vete; y desde ahora no peques más."
(John 8:11)