Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Moisés los llamó, y Aarón y todos los jefes de la congregación regresaron a él, y Moisés les habló. (Exodus 34:31)
Después se acercaron todos los Israelitas, y él les mandó que hicieran todo lo que el SEÑOR había hablado con él en el Monte Sinaí. (Exodus 34:32)
Cuando Moisés acabó de hablar con ellos, puso un velo sobre su rostro. (Exodus 34:33)
Pero siempre que Moisés entraba a la presencia del SEÑOR para hablar con El, se quitaba el velo hasta que salía. Siempre que él salía, decía a los Israelitas lo que el SEÑOR le había ordenado.
Los Israelitas veían que la piel del rostro de Moisés resplandecía, y Moisés volvía a ponerse el velo sobre su rostro hasta que entraba a hablar con Dios. (Exodus 34:35)
Entonces Moisés reunió a toda la congregación de los Israelitas, y les dijo: "Estas son las cosas que el SEÑOR les ha mandado hacer. (Exodus 35:1)
Seis días se trabajará, pero el séptimo día será para ustedes un día santo, día de completo reposo para el SEÑOR. Cualquiera que haga trabajo alguno en él, morirá. (Exodus 35:2)

Other publications related to "Exodus 34:34":

Dr. Roberto Miranda
Subjection to authority
Dr. Roberto Miranda discusses the importance of submitting to authority in his sermon, emphasizing the harm caused by rebellion and disobedience. The physical and spiritual worlds are both governed by authoritative principles, and even imperfect authorities should be respected. The sermon encourages living according to Gods principles.


Juan Carlos Alzamora
God gave you space, now give God space
The importance of pursuing Gods glory, holiness, and presence is emphasized in this article, along with the need for humility, obedience, and hunger for God. The author also talks about how revivals in the past started with humble families and individuals who knew how to pray and sing hymns, encouraging the congregation to give God space and time.


Exodus 34:34 - Cross Reference

Pero cuando alguien se vuelve al Señor, el velo es quitado. (2 Corinthians 3:16)
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús, (Hebrews 10:19)
Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna. (Hebrews 4:16)