Nueva Biblia Latinoamericana
Llevarán turbantes de lino sobre sus cabezas, y calzoncillos de lino sobre sus lomos; no se pondrán nada que los haga sudar. (Ezekiel 44:18)
Cuando salgan al atrio exterior, al atrio exterior donde está el pueblo, se quitarán las vestiduras con que han estado sirviendo y las dejarán en las cámaras sagradas, y se pondrán otras vestiduras a fin de no santificar al pueblo con sus vestiduras. (Ezekiel 44:19)
No se afeitarán la cabeza, ni se dejarán crecer el cabello; sólo se recortarán el pelo de su cabeza. (Ezekiel 44:20)
Ningún sacerdote beberá vino cuando entre al atrio interior.
No tomará por mujer ni a viuda ni a divorciada, sino que tomará a una virgen del linaje de la casa de Israel, o a una viuda que sea viuda de sacerdote. (Ezekiel 44:22)
Enseñarán a Mi pueblo a discernir entre lo sagrado y lo profano, y harán que ellos sepan distinguir entre lo inmundo y lo limpio. (Ezekiel 44:23)
En un pleito actuarán como jueces; lo decidirán conforme a Mis ordenanzas. También guardarán Mis leyes y Mis estatutos en todas Mis fiestas señaladas, y santificarán Mis días de reposo. (Ezekiel 44:24)

Other publications related to "Ezekiel 44:21":

Dr. Roberto Miranda
You will be called a wicket repairman
Reflections on the challenges and opportunities for the Lion of Judah congregation in Boston to be a source of blessings to others, including the homeless community and a family in need of financial assistance for their daughters lung transplant. Emphasis on the importance of being a wicket repairman and restoring ruins, as well as living for Gods glory.


Milagros García Klibansky
A veil in the heart
The article emphasizes the importance of focusing on what is in our hearts rather than external practices and encourages us to not veil our hearts.


Ezekiel 44:21 - Cross Reference

Ya no bebas agua sola, sino usa un poco de vino por causa de tu estómago y de tus frecuentes enfermedades. (1 Timothy 5:23)
porque él será grande delante del Señor. No beberá vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde el vientre de su madre, (Luke 1:15)
Ustedes no beberán vino ni licor, ni tú ni tus hijos contigo, cuando entren en la tienda de reunión, para que no mueran. Es un estatuto perpetuo por todas sus generaciones, (Leviticus 10:9)
Porque el obispo (supervisor) debe ser irreprensible como administrador de Dios, no obstinado, no iracundo, no dado a la bebida, no pendenciero, no amante de ganancias deshonestas. (Titus 1:7)
De la misma manera, también los diáconos deben ser dignos, de una sola palabra, no dados al mucho vino, ni amantes de ganancias deshonestas, (1 Timothy 3:8)