Nueva Biblia Latinoamericana
La boca del necio es su ruina, Y sus labios una trampa para su alma. (Proverbs 18:7)
Las palabras del chismoso son como bocados deliciosos, Y penetran hasta el fondo de las entrañas. (Proverbs 18:8)
También el que es negligente en su trabajo Es hermano del que destruye. (Proverbs 18:9)
El nombre del SEÑOR es torre fuerte, A ella corre el justo y está a salvo.
La fortuna del rico es su ciudad fortificada, Y como muralla alta en su imaginación. (Proverbs 18:11)
Antes de la destrucción el corazón del hombre es altivo, Pero a la gloria precede la humildad. (Proverbs 18:12)
El que responde antes de escuchar, Cosecha necedad y vergüenza. (Proverbs 18:13)

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Proverbs 18:10 - Cross Reference

Entonces Moisés dijo a Dios: "Si voy a los Israelitas, y les digo: 'El Dios de sus padres me ha enviado a ustedes,' tal vez me digan: '¿Cuál es Su nombre?' ¿qué les responderé?" (Exodus 3:13)
Los extranjeros me fingen obediencia, Al oírme, me obedecen. (2 Samuel 22:45)
Porque Tú has sido refugio para mí, Torre fuerte frente al enemigo. (Psalm 61:3)
El SEÑOR es mi roca, mi baluarte y mi libertador; Mi Dios, mi roca en quien me refugio; Mi escudo y el poder de mi salvación, mi altura inexpugnable. (Psalm 18:2)
Porque así dice el Alto y Sublime Que vive para siempre, cuyo nombre es Santo: "Yo habito en lo alto y santo, Y también con el contrito y humilde de espíritu, Para vivificar el espíritu de los humildes Y para vivificar el corazón de los contritos. (Isaiah 57:15)
Confíen en el SEÑOR para siempre, Porque en DIOS el SEÑOR, tenemos una Roca eterna. (Isaiah 26:4)
Yo me aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob como Dios Todopoderoso (El Shaddai), pero por Mi nombre, SEÑOR, no me di a conocer a ellos. (Exodus 6:3)
Porque en Mí ha puesto su amor, Yo entonces lo libraré; Lo exaltaré, porque ha conocido Mi nombre. (Psalm 91:14)
Diré yo al SEÑOR: "Refugio mío y fortaleza mía, Mi Dios, en quien confío." (Psalm 91:2)
Salmo de David. El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿A quién temeré? El SEÑOR es la fortaleza de mi vida; ¿De quién tendré temor? (Psalm 27:1)
El es torre de salvación a Su rey, Y muestra misericordia a Su ungido, A David y a su descendencia para siempre." (2 Samuel 22:51)
Cuando Abram tenía noventa y nueve años, el SEÑOR se le apareció, y le dijo: "Yo soy el Dios Todopoderoso; Anda delante de Mí, y sé perfecto. (Genesis 17:1)
Líbrame, Te ruego, de la mano de mi hermano, de la mano de Esaú, porque yo le tengo miedo, no sea que venga y me hiera a mí y a las madres con los hijos. (Genesis 32:11)
Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado, Y la soberanía reposará sobre Sus hombros. Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz. (Isaiah 9:6)
Mi Dios, mi roca en quien me refugio; Mi escudo y el poder de mi salvación, mi altura inexpugnable y mi refugio; Salvador mío, Tú me salvas de la violencia. (2 Samuel 22:3)
En sus días Judá será salvada, E Israel morará seguro; Y éste es Su nombre por el cual será llamado: 'El SEÑOR, justicia nuestra.' (Jeremiah 23:6)
HE AQUI, LA VIRGEN CONCEBIRA Y DARA A LUZ UN HIJO, Y LE PONDRAN POR NOMBRE EMMANUEL," que traducido significa: "DIOS CON NOSOTROS." (Matthew 1:23)
Y el hombre dijo: "Tu nombre ya no será Jacob, sino Israel (El que lucha con Dios), porque has luchado con Dios y con los hombres, y has prevalecido." (Genesis 32:28)
Misericordia mía y fortaleza mía, Mi baluarte y mi libertador, Escudo mío en quien me he refugiado, El que sujeta a mi pueblo debajo de mí. (Psalm 144:2)
El día en que temo, Yo en Ti confío. (Psalm 56:3)
El Señor DIOS es mi fortaleza; El ha hecho mis pies como los de las ciervas, Y por las alturas me hace caminar. Para el director del coro, con mis instrumentos de cuerda. (Habakkuk 3:19)
El SEÑOR descendió en la nube y estuvo allí con él, mientras éste invocaba el nombre del SEÑOR. (Exodus 34:5)
Y David estaba muy angustiado porque la gente hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba amargado, cada uno a causa de sus hijos y de sus hijas. Pero David se fortaleció en el SEÑOR su Dios. (1 Samuel 30:6)
Yo soy el Alfa y la Omega," dice el Señor Dios, "el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso." (Revelation 1:8)