Has ordenado Tus testimonios con justicia, Y con suma fidelidad.
(Psalm 119:138)
Mi celo me ha consumido, Porque mis adversarios han olvidado Tus palabras.
(Psalm 119:139)
Es muy pura Tu palabra, Y Tu siervo la ama.
(Psalm 119:140)
Pequeño soy, y despreciado, Pero no me olvido de Tus preceptos.
Tu justicia es justicia eterna, Y Tu ley verdad.
(Psalm 119:142)
Angustia y aflicción han venido sobre mí, Pero Tus mandamientos son mi deleite.
(Psalm 119:143)
Tus testimonios son justos para siempre; Dame entendimiento para que yo viva.
(Psalm 119:144)
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En peligro continuo está mi vida, Con todo, no me olvido de Tu ley.
(Psalm 119:109)
Mejor es poco con temor del SEÑOR, Que gran tesoro con turbación.
(Proverbs 15:16)
Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos," le dijo Jesús, "pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza."
(Luke 9:58)
Fue despreciado y desechado de los hombres, Varón de dolores y experimentado en aflicción; Y como uno de quien los hombres esconden el rostro, Fue despreciado, y no Lo estimamos.
(Isaiah 53:3)
Me he descarriado como oveja perdida; busca a Tu siervo, Porque no me olvido de Tus mandamientos.
(Psalm 119:176)
Mejor es poco con justicia, Que gran ganancia con injusticia.
(Proverbs 16:8)
Volviendo su vista hacia Sus discípulos, decía: "Bienaventurados ustedes los pobres, porque de ustedes es el reino de Dios.
(Luke 6:20)
Hermanos míos amados, escuchen: ¿No escogió Dios a los pobres de este mundo para ser ricos en fe y herederos del reino que El prometió a los que Lo aman?
(James 2:5)
Hijo mío, no te olvides de mi enseñanza, Y tu corazón guarde mis mandamientos,
(Proverbs 3:1)
Por cuanto yo estoy afligido y necesitado, El Señor me tiene en cuenta. Tú eres mi ayuda y mi libertador; Dios mío, no Te tardes.
(Psalm 40:17)
Mejor es el pobre que anda en su integridad Que el de labios perversos y necio.
(Proverbs 19:1)
Pero yo soy gusano, y no hombre; Oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.
(Psalm 22:6)
Porque conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que siendo rico, sin embargo por amor a ustedes se hizo pobre, para que por medio de Su pobreza ustedes llegaran a ser ricos.
(2 Corinthians 8:9)