Nueva Biblia Latinoamericana
Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tus descendientes para siempre." Y él salió de su presencia leproso, blanco como la nieve. (2 Reyes 5:27)
Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: "Mire, el lugar en que habitamos con usted es muy estrecho para nosotros. (2 Reyes 6:1)
Le rogamos que nos deje ir al Jordán, para que cada uno de nosotros tome de allí una viga, y nos hagamos allí un lugar donde habitar." Y él dijo: "Vayan." (2 Reyes 6:2)
Entonces uno dijo: "Le rogamos que consienta ir con sus siervos." Y Eliseo respondió: "Yo iré."
Fue, pues, con ellos; y cuando llegaron al Jordán, cortaron árboles. (2 Reyes 6:4)
Pero sucedió que cuando uno de ellos estaba derribando un tronco, el hierro del hacha se le cayó al agua; y gritó, y dijo: "¡Ah, señor mío, era prestado!" (2 Reyes 6:5)
Entonces el hombre de Dios dijo: "¿Dónde cayó?" Y cuando le mostró el lugar, cortó un palo y lo echó allí, e hizo flotar el hierro. (2 Reyes 6:6)

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2 Reyes 6:3 - Referencia Cruzada

Y ahora, traten de mirarme, Y vean si miento en sus propias caras. (Job 6:28)
Barac le respondió: "Si tú vas conmigo, yo iré; pero si no vas conmigo, no iré." (Jueces 4:8)
Y Naamán dijo: "Dígnate aceptar 64 kilos." Y le insistió y ató 64 kilos de plata en dos bolsas con dos mudas de ropa, y los entregó a dos de sus criados; y éstos los llevaron delante de Giezi. (2 Reyes 5:23)
Se sentaron, pues, los dos y comieron y bebieron juntos. Y el padre de la joven dijo al hombre: "Te ruego que te dignes pasar la noche, y que se alegre tu corazón." (Jueces 19:6)