Hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, aunque no como su padre y su madre, pues quitó el pilar sagrado de Baal que su padre había hecho. (2 Reyes 3:2)

Sin embargo, se aferró a los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los que hizo pecar a Israel, y no se apartó de ellos. (2 Reyes 3:3)

Y Mesa, rey de Moab, era criador de ovejas, y pagaba al rey de Israel 100,000 corderos y la lana de 100,000 carneros. (2 Reyes 3:4)

Y aquel mismo día el rey Joram salió de Samaria y alistó a todo Israel. (2 Reyes 3:6)

Y fue y envió palabra a Josafat, rey de Judá, diciendo: "El rey de Moab se ha rebelado contra mí. ¿Irás conmigo a pelear contra Moab?" Y él respondió: "Subiré. Yo soy como tú, mi pueblo como tu pueblo, mis caballos como tus caballos." (2 Reyes 3:7)

Y le preguntó: "¿Por qué camino subiremos?" Y Joram respondió: "Por el camino del desierto de Edom." (2 Reyes 3:8)