Tenía treinta y dos años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén.
(2 Reyes 8:17)
Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, tal como había hecho la casa de Acab (porque la hija de Acab era su mujer); e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR.
(2 Reyes 8:18)
Sin embargo, el SEÑOR no quiso destruir a Judá por amor a David Su siervo, ya que le había prometido darle una lámpara por medio de sus hijos para siempre.
(2 Reyes 8:19)
En sus días se rebeló Edom contra el dominio de Judá, y pusieron rey sobre ellos.
Entonces pasó Joram a Zair, y todos sus carros con él. Y se levantó de noche y atacó a los Edomitas que lo tenían cercado a él y a los jefes de los carros, pero su ejército huyó a sus tiendas.
(2 Reyes 8:21)
Y Edom se rebeló contra el dominio de Judá, hasta el día de hoy. Entonces Libna se rebeló en ese mismo tiempo.
(2 Reyes 8:22)
Los demás hechos de Joram y todo lo que hizo, ¿no están escritos en el Libro de las Crónicas de los reyes de Judá?
(2 Reyes 8:23)
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2 Reyes 8:20 - Referencia Cruzada
Puso guarniciones en Edom; por todo Edom puso guarniciones, y todos los Edomitas fueron siervos de David. Y el SEÑOR daba la victoria a David dondequiera que iba.
(2 Samuel 8:14)
Entonces tomó a su hijo primogénito que había de reinar en su lugar, y lo ofreció en holocausto sobre la muralla. Y hubo gran ira contra los Israelitas, quienes se apartaron de allí y regresaron a su tierra.
(2 Reyes 3:27)
Entonces el rey de Israel fue con el rey de Judá y el rey de Edom; y después de dar un rodeo de siete días de camino, no había agua para el ejército ni para los animales que los seguían.
(2 Reyes 3:9)
En sus días se rebeló Edom contra el dominio de Judá, y pusieron rey sobre ellos.
(2 Crónicas 21:8)
No había entonces ningún rey en Edom; había gobernador en lugar de rey.
(1 Reyes 22:47)
Por tu espada vivirás, Y a tu hermano servirás; Mas acontecerá que cuando te impacientes, Arrancarás su yugo de tu cuello."
(Génesis 27:40)
Y Edom se rebeló contra el dominio de Judá, hasta el día de hoy. Entonces Libna se rebeló en ese mismo tiempo.
(2 Reyes 8:22)