Elías tomó doce piedras conforme al número de las tribus de los hijos de Jacob, a quien había venido la palabra del SEÑOR, diciendo: "Israel será tu nombre."
(1 Reyes 18:31)
Con las piedras edificó un altar en el nombre del SEÑOR, e hizo una zanja alrededor del altar, suficientemente grande para contener dos medidas (14.6 litros) de semilla.
(1 Reyes 18:32)
Dispuso después la leña, cortó el novillo en pedazos y lo colocó sobre la leña.
(1 Reyes 18:33)
Y dijo: "Llenen cuatro cántaros de agua y derrámenla sobre el holocausto y sobre la leña." Después dijo: "Háganlo por segunda vez; y lo hicieron por segunda vez." Y añadió: "Háganlo por tercera vez;" y lo hicieron por tercera vez.
El agua corría alrededor del altar, y también llenó la zanja de agua.
(1 Reyes 18:35)
Y a la hora de ofrecerse el sacrificio de la tarde , el profeta Elías se acercó y dijo: "Oh SEÑOR, Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, que se sepa hoy que Tú eres Dios en Israel, que yo soy Tu siervo y que he hecho todas estas cosas por palabra Tuya.
(1 Reyes 18:36)
Respóndeme, oh SEÑOR, respóndeme, para que este pueblo sepa que Tú, oh SEÑOR, eres Dios, y que has hecho volver sus corazones."
(1 Reyes 18:37)
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1 Reyes 18:34 - Referencia Cruzada
Pues nos preocupamos por lo que es honrado, no sólo ante los ojos del Señor, sino también ante los ojos de los hombres.
(2 Corintios 8:21)
Más bien hemos renunciado a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino que, mediante la manifestación de la verdad, nos recomendamos a la conciencia de todo hombre en la presencia de Dios.
(2 Corintios 4:2)