Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando David se levantó por la mañana, la palabra del SEÑOR vino al profeta Gad, vidente de David, diciendo: (2 Samuel 24:11)
Ve y dile a David: 'Así dice el SEÑOR: "Te ofrezco tres cosas; escoge para ti una de ellas, para que Yo la haga."'" (2 Samuel 24:12)
Así que Gad fue a David y se lo hizo saber, diciéndole: "¿Quieres que te vengan siete años de hambre en tu tierra, o que huyas por tres meses delante de tus enemigos mientras te persiguen, o que haya tres días de pestilencia en tu tierra? Considera ahora, y mira qué respuesta he de dar al que me envió." (2 Samuel 24:13)
David respondió a Gad: "Estoy muy angustiado. Te ruego que nos dejes caer en manos del SEÑOR porque grandes son Sus misericordias, pero no caiga yo en manos de hombre."
Y el SEÑOR envió pestilencia sobre Israel desde la mañana hasta el tiempo señalado; y desde Dan hasta Beerseba murieron 70,000 hombres del pueblo. (2 Samuel 24:15)
Cuando el ángel extendió su mano hacia Jerusalén para destruirla, el SEÑOR se arrepintió del mal, y dijo al ángel que destruía al pueblo: "¡Basta! ¡Detén ahora tu mano!" Y el ángel del SEÑOR estaba junto a la era de Arauna el Jebuseo. (2 Samuel 24:16)
Entonces David habló al SEÑOR, cuando vio al ángel que hería al pueblo, y dijo: "Yo soy el que ha pecado, y yo soy el que ha hecho mal; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Te ruego que Tu mano caiga sobre mí y sobre la casa de mi padre." (2 Samuel 24:17)

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2 Samuel 24:14 - Referencia Cruzada

Entonces pasó el SEÑOR por delante de él y proclamó: "El SEÑOR, el SEÑOR, Dios compasivo y clemente, lento para la ira y abundante en misericordia y verdad (fidelidad); (Éxodo 34:6)
Pues Tú, Señor, eres bueno y perdonador, Abundante en misericordia para con todos los que Te invocan. (Salmos 86:5)
¿Qué Dios hay como Tú, que perdona la iniquidad Y pasa por alto la rebeldía del remanente de su heredad? No persistirá en Su ira para siempre, Porque se complace en la misericordia. (Miqueas 7:18)
Pero en Ti hay perdón, Para que seas temido. (Salmos 130:4)
El SEÑOR es bueno para con todos, Y su compasión, sobre todas Sus obras. (Salmos 145:9)
Estaba enojado contra Mi pueblo, Profané Mi heredad Y en tu mano los entregué. No les mostraste compasión, Sobre el anciano hiciste muy pesado tu yugo, (Isaías 47:6)
Los entregó en mano de las naciones, Y los que los aborrecían se enseñorearon sobre ellos. (Salmos 106:41)
Y cuando el que servía al hombre de Dios se levantó temprano y salió, vio que un ejército con caballos y carros rodeaba la ciudad. Y su criado le dijo: "¡Ah, señor mío! ¿Qué haremos?" (2 Reyes 6:15)
Cuando los hombres de Israel vieron que estaban en un apuro, pues el pueblo estaba en gran aprieto, el pueblo se escondió en cuevas, en matorrales, en peñascos, en sótanos y en fosos. (1 Samuel 13:6)
Para el director del coro. Salmo de David, cuando después que se llegó a Betsabé, el profeta Natán lo visitó. Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a Tu misericordia; Conforme a lo inmenso de Tu compasión, borra mis transgresiones. (Salmos 51:1)
Estoy muy angustiado," David respondió a Gad. "Te ruego que me dejes caer en manos del SEÑOR, porque Sus misericordias son muy grandes; pero no caiga yo en manos de hombre." (1 Crónicas 21:13)
Porque de ambos lados me siento apremiado, teniendo el deseo de partir y estar con Cristo, pues eso es mucho mejor. (Filipenses 1:23)
El justo se preocupa de la vida de su ganado, Pero las entrañas de los impíos son crueles. (Proverbios 12:10)
Pero Yo estoy muy enojado contra las naciones que están confiadas; porque cuando Yo estaba un poco enojado, ellas contribuyeron al mal.'" (Zacarías 1:15)
Abandone el impío su camino, Y el hombre malvado sus pensamientos, Y vuélvase al SEÑOR, Que tendrá de él compasión, Al Dios nuestro, Que será amplio en perdonar. (Isaías 55:7)
Muchas son, oh SEÑOR, Tus misericordias; Vivifícame conforme a Tus ordenanzas. (Salmos 119:156)
Compasivo y clemente es el SEÑOR, Lento para la ira y grande en misericordia. (Salmos 103:8)
Ahora Mi alma se ha angustiado; y ¿qué diré: 'Padre, sálvame de esta hora'? Pero para esto he llegado a esta hora. (Juan 12:27)
Por lo cual el SEÑOR su Dios lo entregó en manos del rey de los Arameos, que lo derrotaron, tomaron de él gran número de cautivos y los llevaron a Damasco. Y también él fue entregado en manos del rey de Israel, el cual lo hirió con gran mortandad. (2 Crónicas 28:5)
Y oró al SEÑOR: "¡Ah SEÑOR! ¿No era esto lo que yo decía cuando aún estaba en mi tierra? Por eso me anticipé a huir a Tarsis. Porque yo sabía que Tú eres un Dios clemente y compasivo, lento para la ira y rico en misericordia, y que Te arrepientes del mal anunciado . (Jonás 4:2)
Pero Tú, Señor, eres un Dios compasivo y lleno de piedad, Lento para la ira y abundante en misericordia y fidelidad. (Salmos 86:15)
Y la ira del SEÑOR se encendió contra Israel, y los entregó día tras día en mano de Hazael, rey de Aram, y en mano de Ben Adad, hijo de Hazael. (2 Reyes 13:3)