Nueva Biblia Latinoamericana
Y todo Israel oyó decir que Saúl había herido la guarnición de los Filisteos, y también que Israel se había hecho odioso a los Filisteos. Entonces el pueblo se reunió con Saúl en Gilgal. (1 Samuel 13:4)
Y los Filisteos se reunieron para pelear contra Israel: 30,000 carros, 6,000 hombres de a caballo y gente tan numerosa como la arena a la orilla del mar; y subieron y acamparon en Micmas, al oriente de Bet Avén. (1 Samuel 13:5)
Cuando los hombres de Israel vieron que estaban en un apuro, pues el pueblo estaba en gran aprieto, el pueblo se escondió en cuevas, en matorrales, en peñascos, en sótanos y en fosos. (1 Samuel 13:6)
También algunos de los Hebreos pasaron el Jordán a la tierra de Gad y de Galaad. Pero Saúl estaba todavía en Gilgal, y todo el pueblo le seguía atemorizado.
El esperó siete días, conforme al tiempo que Samuel había señalado, pero Samuel no llegaba a Gilgal, y el pueblo se le dispersaba. (1 Samuel 13:8)
Entonces Saúl dijo: "Tráiganme el holocausto y las ofrendas de paz." Y él ofreció el holocausto. (1 Samuel 13:9)
Tan pronto como terminó de ofrecer el holocausto, llegó Samuel; y Saúl salió a su encuentro para saludarle. (1 Samuel 13:10)

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1 Samuel 13:7 - Referencia Cruzada

En pos del SEÑOR caminarán, El rugirá como un león; Ciertamente El rugirá, Y Sus hijos vendrán temblando desde el occidente. (Oseas 11:10)
Fijaré Mi rostro contra ustedes, para que sean derrotados delante de sus enemigos; los que los aborrecen los dominarán y ustedes huirán sin que nadie los persiga. (Levítico 26:17)
Entonces los oficiales hablarán otra vez al pueblo, y dirán: '¿Quién es hombre medroso y de corazón apocado? Que salga y regrese a su casa para que no haga desfallecer el corazón de sus hermanos como desfallece el corazón suyo.' (Deuteronomio 20:8)
El SEÑOR hará que seas derrotado delante de tus enemigos; saldrás contra ellos por un camino, pero huirás por siete caminos delante de ellos, y serás ejemplo de terror para todos los reinos de la tierra. (Deuteronomio 28:25)
En cuanto a los que queden de ustedes, infundiré cobardía en sus corazones en la tierra de sus enemigos; y el sonido de una hoja que se mueva los ahuyentará, y aun cuando nadie los persiga, huirán como quien huye de la espada, y caerán. (Levítico 26:36)
Los hijos de Rubén y los hijos de Gad tenían una cantidad muy grande de ganado. Por eso, cuando vieron la tierra de Jazer y la tierra de Galaad, que en verdad era un lugar bueno para ganado, (Números 32:1)
Entonces Moisés dio a los Gaditas, y a los Rubenitas, y a la media tribu de Manasés, hijo de José, el reino de Sehón, rey de los Amorreos, y el reino de Og, rey de Basán: la tierra con sus ciudades, con sus territorios, y las ciudades de la tierra circunvecina. (Números 32:33)
Tomamos posesión, pues, de esta tierra en aquel tiempo. Desde Aroer, que está en el Valle del Arnón, y la mitad de la región montañosa de Galaad y sus ciudades, se la di a los Rubenitas y a los Gaditas. (Deuteronomio 3:12)
Moisés también había dado una heredad a la tribu de Gad, a los hijos de Gad, conforme a sus familias. (Josué 13:24)
Ahora pues, proclama a oídos del pueblo: 'Cualquiera que tenga miedo y tiemble, que regrese y se vaya del Monte Galaad.'" Y 22,000 personas regresaron, pero quedaron 10,000. (Jueces 7:3)