Entonces Sansón dijo al muchacho que lo tenía de la mano: "Déjame tocar las columnas sobre las que el edificio descansa, para apoyarme en ellas."
(Jueces 16:26)El edificio estaba lleno de hombres y mujeres, y todos los príncipes de los Filisteos estaban allí. Y sobre la azotea había como 3,000 hombres y mujeres mirando mientras Sansón los divertía.
(Jueces 16:27)Entonces Sansón invocó al SEÑOR y dijo: "Señor DIOS, Te ruego que Te acuerdes de mí, y Te suplico que me des fuerzas sólo esta vez, oh Dios, para vengarme ahora de los Filisteos por mis dos ojos."
(Jueces 16:28)Sansón palpó las dos columnas del medio sobre las que el edificio descansaba y se apoyó contra ellas, con su mano derecha sobre una y con su mano izquierda sobre la otra.
Y dijo Sansón: "¡Muera yo con los Filisteos!" Y se inclinó con todas sus fuerzas y el edificio se derrumbó sobre los príncipes y sobre todo el pueblo que estaba en él. Así que los que mató al morir fueron más que los que había matado durante su vida.
(Jueces 16:30)Entonces descendieron sus hermanos y toda la casa de su padre, y tomándolo, lo llevaron y lo sepultaron entre Zora y Estaol en la tumba de Manoa, su padre. Sansón había juzgado a Israel veinte años.
(Jueces 16:31)Había un hombre de la región montañosa de Efraín, llamado Micaía.
(Jueces 17:1)Otras publicaciones relacionadas con "Jueces 16:29":
Jueces 16:29 - Referencia Cruzada