Nueva Biblia Latinoamericana
y oirás lo que dicen. Entonces tus manos serán fortalecidas para descender contra el campamento." Y descendió con su criado Fura hasta los puestos avanzados del ejército que estaban en el campamento. (Jueces 7:11)
Los Madianitas, los Amalecitas y todos los hijos del oriente estaban recostados en el valle, numerosos como langostas; y sus camellos eran innumerables, tan numerosos como la arena a la orilla del mar. (Jueces 7:12)
Cuando Gedeón llegó allí, un hombre estaba contando un sueño a su amigo: "Escuchen, tuve un sueño. Un pan de cebada iba rodando hasta el campamento de Madián, y llegó hasta la tienda y la golpeó de manera que cayó, y la volcó de arriba abajo y la tienda quedó extendida." (Jueces 7:13)
Su amigo le respondió: "Esto no es otra cosa que la espada de Gedeón, hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en su mano a Madián y a todo el campamento."
Cuando Gedeón oyó el relato del sueño y su interpretación, se inclinó y adoró. Volvió al campamento de Israel, y dijo: "Levántense, porque el SEÑOR ha entregado en manos de ustedes el campamento de Madián." (Jueces 7:15)
Y dividió los 300 hombres en tres compañías, y puso trompetas y cántaros vacíos en las manos de todos ellos, con antorchas dentro de los cántaros. (Jueces 7:16)
Mírenme," les dijo, "y hagan lo mismo que yo. Y cuando yo llegue a las afueras del campamento, como yo haga, así harán ustedes. (Jueces 7:17)

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Jueces 7:14 - Referencia Cruzada

Entonces se encendió la ira de Balac contra Balaam, y palmoteando, dijo Balac a Balaam: "Te llamé para maldecir a mis enemigos, pero los has llenado de bendiciones estas tres veces. (Números 24:10)
Mira, he recibido orden de bendecir; Si El ha bendecido, yo no lo puedo anular. (Números 23:20)
Lo han oído los pueblos y tiemblan; El pavor se ha apoderado de los habitantes de Filistea. (Éxodo 15:14)
Porque el Señor había hecho que el ejército de los Arameos oyera estruendo de carros y ruido de caballos, el estruendo de un gran ejército, de modo que se dijeron el uno al otro: "Ciertamente el rey de Israel ha tomado a sueldo contra nosotros a los reyes de los Hititas y a los reyes de los Egipcios, para que vengan contra nosotros." (2 Reyes 7:6)
Balaam respondió a Balac: "Mira, ahora he venido a ti. ¿Hay algo, acaso, que pueda decir? La palabra que Dios ponga en mi boca, ésa diré." (Números 22:38)
Y el SEÑOR puso palabra en la boca de Balaam, y le dijo: "Vuelve a Balac y así hablarás." (Números 23:5)
y dijo a los hombres: "Sé que el SEÑOR les ha dado esta tierra, y que el terror de ustedes ha caído sobre nosotros, y que todos los habitantes del país se han acobardado ante ustedes. (Josué 2:9)
Y dijeron a Josué: "Ciertamente, el SEÑOR ha entregado toda la tierra en nuestras manos, y además, todos los habitantes de la tierra se han acobardado ante nosotros." (Josué 2:24)
Cuando todos los reyes de los Amorreos que estaban al otro lado del Jordán hacia el occidente, y todos los reyes de los Cananeos que estaban junto al mar, oyeron cómo el SEÑOR había secado las aguas del Jordán delante de los Israelitas hasta que ellos habían pasado, sus corazones se acobardaron, y ya no había ánimo en ellos a causa de los Israelitas. (Josué 5:1)
¿No has hecho Tú una valla alrededor de él, de su casa y de todo lo que tiene, por todos lados? Has bendecido el trabajo de sus manos y sus posesiones han aumentado en la tierra. (Job 1:10)