Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Gedeón le respondió: "Ah señor mío, si el SEÑOR está con nosotros, ¿por qué nos ha ocurrido todo esto? ¿Y dónde están todas Sus maravillas que nuestros padres nos han contado, diciendo: '¿No nos hizo el SEÑOR subir de Egipto?' Pero ahora el SEÑOR nos ha abandonado, y nos ha entregado en mano de los Madianitas." (Jueces 6:13)
Y el SEÑOR lo miró, y le dijo: "Ve con esta tu fuerza, y libra a Israel de la mano de los Madianitas. ¿No te he enviado Yo?" (Jueces 6:14)
Ah Señor," le respondió Gedeón, "¿cómo libraré a Israel? Mi familia es la más pobre en Manasés, y yo el menor de la casa de mi padre." (Jueces 6:15)
Pero el SEÑOR le dijo: "Ciertamente Yo estaré contigo, y derrotarás a Madián como a un solo hombre."
Y Gedeón Le dijo: "Si he hallado gracia ante Tus ojos, muéstrame una señal de que eres Tú el que hablas conmigo. (Jueces 6:17)
Te ruego que no Te vayas de aquí hasta que yo vuelva a Ti, y traiga mi ofrenda y la ponga delante de Ti." "Me quedaré hasta que vuelvas," le respondió el SEÑOR. (Jueces 6:18)
Y Gedeón entró y preparó un cabrito y pan sin levadura con un efa de harina (22 litros). Puso la carne en una cesta y el caldo en un caldero, y los llevó y se los presentó al ángel debajo de la encina. (Jueces 6:19)

Otras publicaciones relacionadas con "Jueces 6:16":

Gregory Bishop
Gedeón
La historia de Gedeón en el Libro de Jueces habla sobre su llamado divino para liderar a los israelitas y salvarlos del enemigo. A través de sus dudas e incertidumbres, aprende a confiar en Dios y lidera a su pueblo a la victoria contra un gran ejército enemigo.


Dr. Roberto Miranda
Segundo Servicio Jueces 7:7
En este sermón, el Dr. Roberto Miranda explica las lecciones espirituales que se pueden aprender del pasaje de Jueces 7:7 y cómo aplicarlas a la vida cristiana actual. Se habla de la importancia de tener la unción, el discernimiento profético, la visibilidad y la proclamación del Evangelio en la batalla espiritual.


Jueces 6:16 - Referencia Cruzada

enseñándoles a guardar todo lo que les he mandado; y ¡recuerden (he aquí)! Yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo." (Mateo 28:20)
Ciertamente Yo estaré contigo," le respondió el SEÑOR, "y la señal para ti de que soy Yo el que te ha enviado será ésta: cuando hayas sacado al pueblo de Egipto ustedes adorarán (servirán) a Dios en este monte." (Éxodo 3:12)
No temas, gusano de Jacob, ustedes hombres de Israel. Yo te ayudaré," declara el SEÑOR, "tu Redentor es el Santo de Israel. (Isaías 41:14)
No temas, porque Yo estoy contigo; No te desalientes, porque Yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, Sí, te sostendré con la diestra de Mi justicia. (Isaías 41:10)
La mano del Señor estaba con ellos, y gran número que creyó se convirtió al Señor. (Hechos 11:21)
Y el ángel del SEÑOR se le apareció, y le dijo: "El SEÑOR está contigo, valiente guerrero." (Jueces 6:12)
Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida. Así como estuve con Moisés, estaré contigo. No te dejaré ni te abandonaré. (Josué 1:5)
Y ellos salieron y predicaron por todas partes, colaborando el Señor con ellos, y confirmando la palabra por medio de las señales que la seguían. Ellas comunicaron inmediatamente a Pedro y a sus compañeros todas estas instrucciones. Y después de esto, Jesús mismo envió por medio de ellos, desde el oriente hasta el occidente, el mensaje sacrosanto e incorruptible de la salvación eterna. (Marcus 16:20)