Nueva Biblia Latinoamericana
Desde los cielos las estrellas pelearon, Desde sus órbitas pelearon contra Sísara. (Jueces 5:20)
El torrente Cisón los barrió, El antiguo torrente, el torrente Cisón. Marcha, alma mía con poder. (Jueces 5:21)
Entonces resonaron los cascos de los caballos Por el galopar, el galopar de sus valientes corceles. (Jueces 5:22)
Maldigan a Meroz,' dijo el ángel del SEÑOR, 'maldigan, maldigan a sus moradores; Porque no vinieron en ayuda del SEÑOR, En ayuda del SEÑOR contra los guerreros.'
Bendita entre las mujeres es Jael, Mujer de Heber el Quenita; Bendita sea entre las mujeres de la tienda. (Jueces 5:24)
El pidió agua, y ella le dio leche. En taza de nobles le trajo cuajada. (Jueces 5:25)
Extendió ella la mano hacia la estaca de la tienda, Y su diestra hacia el martillo de trabajadores. Entonces golpeó a Sísara, desbarató su cabeza. Destruyó y perforó sus sienes. (Jueces 5:26)

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Jueces 5:23 - Referencia Cruzada

A su lado hicieron también reparaciones los Tecoítas, pero sus nobles no apoyaron la obra de sus señores. (Nehemías 3:5)
El ángel del SEÑOR subió de Gilgal a Boquim y dijo a los Israelitas: "Yo los saqué a ustedes de Egipto y los conduje a la tierra que había prometido a sus padres y les dije: 'Jamás quebrantaré Mi pacto con ustedes, (Jueces 2:1)
Y como colaboradores con El , también les exhortamos a no recibir en vano la gracia de Dios; (2 Corintios 6:1)
y para que toda esta asamblea sepa que el SEÑOR no libra ni con espada ni con lanza; porque la batalla es del SEÑOR y El los entregará a ustedes en nuestras manos." (1 Samuel 17:47)
Porque no me atreveré a hablar de nada sino de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la obediencia de los Gentiles, en palabra y en obra, (Romanos 15:18)
Porque nosotros somos colaboradores en la labor de Dios, y ustedes son el campo de cultivo de Dios, el edificio de Dios. (1 Corintios 3:9)
Entonces el ángel del SEÑOR se le apareció a la mujer, y le dijo: "Tú eres estéril y no has tenido hijos, pero vas a concebir y a dar a luz un hijo. (Jueces 13:3)
Ella mandó llamar a Barac, hijo de Abinoam, de Cedes de Neftalí, y le dijo: "Esto ha ordenado el SEÑOR, Dios de Israel: 'Ve, marcha al Monte Tabor y lleva contigo a 10,000 hombres de los hijos de Neftalí y de los hijos de Zabulón. (Jueces 4:6)
Porque cuando contaron al pueblo, ninguno de los habitantes de Jabes Galaad estaba allí. (Jueces 21:9)
Entonces dirá también a los de Su izquierda: 'Apártense de Mí, malditos, al fuego eterno que ha sido preparado para el diablo y sus ángeles. (Mateo 25:41)
Le ruego que perdone la ofensa de su sierva, porque el SEÑOR ciertamente establecerá una casa duradera para mi señor, pues mi señor pelea las batallas del SEÑOR, y el mal no se hallará en usted en todos sus días. (1 Samuel 25:28)
Entonces Saúl dijo a David: "Mira, te daré por mujer a Merab, mi hija mayor, con tal que me seas hombre valiente y pelees las batallas del SEÑOR." Pues Saúl se decía: "No será mi mano contra él, sino sea contra él la mano de los Filisteos." (1 Samuel 18:17)
Maldito el que hace la obra del SEÑOR con engaño; Maldito el que retrae su espada de la sangre. (Jeremías 48:10)
Entonces vino el ángel del SEÑOR y se sentó debajo de la encina que estaba en Ofra, la cual pertenecía a Joás de Abiezer. Y su hijo Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el lagar, para esconderlo de los Madianitas. (Jueces 6:11)
Ahora pues, ruego a mi señor el rey que escuche las palabras de su siervo. Si el SEÑOR lo ha movido a usted contra mí, que El acepte una ofrenda, pero si son hombres, malditos sean delante del SEÑOR, porque me han expulsado hoy para que yo no tenga parte en la heredad del SEÑOR, y me dicen: 'Ve, sirve a otros dioses.' (1 Samuel 26:19)
Si alguien no ama al Señor, que sea anatema (maldito). ¡Maranata! (¡El Señor viene!) (1 Corintios 16:22)