Nueva Biblia Latinoamericana
Ellas vinieron delante del sacerdote Eleazar, delante de Josué, hijo de Nun, y delante de los principales y les dijeron: "El SEÑOR mandó a Moisés que nos diera una heredad entre nuestros hermanos." Así que según el mandato del SEÑOR, Josué les dio heredad entre los hermanos de su padre. (Josué 17:4)
A Manasés le tocaron diez porciones, además de la tierra de Galaad y Basán que está al otro lado del Jordán, (Josué 17:5)
porque las hijas de Manasés recibieron heredad entre sus hijos. Y la tierra de Galaad perteneció al resto de los hijos de Manasés. (Josué 17:6)
El límite de Manasés se extendía desde Aser hasta Micmetat, que estaba al oriente de Siquem. Entonces el límite iba hacia el sur hasta los habitantes de En Tapúa.
La tierra de Tapúa pertenecía a Manasés, pero Tapúa en la frontera con Manasés pertenecía a los hijos de Efraín. (Josué 17:8)
El límite descendía hasta el arroyo de Caná, hacia el sur del arroyo (estas ciudades pertenecían a Efraín entre las ciudades de Manasés). El límite de Manasés estaba al lado norte del arroyo, y terminaba en el mar. (Josué 17:9)
El lado sur pertenecía a Efraín, el lado norte a Manasés y el mar era su límite. Lindaban con Aser al norte y con Isacar al oriente. (Josué 17:10)

Otras publicaciones relacionadas con "Josué 17:7":

Dr. Roberto Miranda
Buena semilla, pero mala tierra
El Capítulo 13 de Números relata la historia de los hebreos que se preparan para entrar en la Tierra Prometida, pero la primera generación de hebreos no pudo entrar debido a su incredulidad y falta de fe. Solo Caleb y Josué, quienes le creyeron a Dios, alcanzaron la bendición. Este artículo nos exhorta a convertirnos en tierra fértil para recibir las semillas de bendición que Dios quiere plantar en nosotros.


Faustino de Jesús Zamora Vargas
¡Dame ese monte!
Artículo titulado ¡Dame ese monte! escrito por Faustino de Jesús Zamora Vargas sobre la actitud y carácter en Cristo que hacen perdurar los sueños e infunden aliento para aprovechar nuevas oportunidades de servir al Señor, con el ejemplo de Caleb y su conquista de las montañas de Hebrón.


Josué 17:7 - Referencia Cruzada

Y les dieron las siguientes ciudades de refugio: Siquem con sus tierras de pastos en la tierra montañosa de Efraín, también Gezer con sus tierras de pastos, (1 Crónicas 6:67)
Entonces Jeroboam edificó Siquem en la región montañosa de Efraín, y habitó allí. De allí salió y edificó Penuel. (1 Reyes 12:25)
Y les dieron Siquem, la ciudad de refugio para el que haya matado a alguien, con sus tierras de pasto, en la región montañosa de Efraín y Gezer con sus tierras de pasto, (Josué 21:21)
Los huesos de José, que los Israelitas habían traído de Egipto, fueron sepultados en Siquem, en la parcela de campo que Jacob había comprado a los hijos de Hamor, padre de Siquem, por 100 monedas de plata. Y pasaron a ser posesión de los hijos de José. (Josué 24:32)
Después sus hermanos fueron a apacentar el rebaño de su padre en Siquem. (Génesis 37:12)
El límite iba hacia el occidente en Micmetat al norte, girando hacia el oriente en Taanat Silo, y continuaba más allá al oriente de Janoa. (Josué 16:6)
Entonces ellos separaron a Cedes en Galilea, en la región montañosa de Neftalí, y a Siquem en la región montañosa de Efraín, y a Quiriat Arba, es decir, Hebrón, en la región montañosa de Judá. (Josué 20:7)
Abimelec, hijo de Jerobaal, fue a Siquem, a los parientes de su madre, y les dijo a ellos y a toda la familia de la casa del padre de su madre: (Jueces 9:1)
Cuando la vio Siquem, hijo de Hamor Heveo, príncipe de la tierra, se la llevó y se acostó con ella y la violó. (Génesis 34:2)
Entonces Roboam fue a Siquem, porque todo Israel había ido a Siquem para hacerlo rey. (1 Reyes 12:1)
Entonces Josué reunió a todas las tribus de Israel en Siquem, llamó a los ancianos de Israel, a sus jefes, a sus jueces y a sus oficiales, y ellos se presentaron delante de Dios. (Josué 24:1)
Entonces Israel le dijo: "Ve ahora y mira cómo están tus hermanos y cómo está el rebaño, y tráeme noticias de ellos." Lo envió, pues, desde el Valle de Hebrón, y José fue a Siquem. (Génesis 37:14)