Nueva Biblia Latinoamericana
Bendito serás en la ciudad, y bendito serás en el campo. (Deuteronomio 28:3)
Bendito el fruto de tu vientre, el producto de tu suelo, el fruto de tu ganado, el aumento de tus vacas y las crías de tus ovejas. (Deuteronomio 28:4)
Benditas serán tu canasta y tu artesa. (Deuteronomio 28:5)
Bendito serás cuando entres, y bendito serás cuando salgas.
El SEÑOR hará que los enemigos que se levanten contra ti sean derrotados delante de ti; saldrán contra ti por un camino y huirán delante de ti por siete caminos. (Deuteronomio 28:7)
El SEÑOR mandará que la bendición sea contigo en tus graneros y en todo aquello en que pongas tu mano, y te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. (Deuteronomio 28:8)
Te establecerá el SEÑOR como pueblo santo para sí, como te juró, si guardas los mandamientos del SEÑOR tu Dios y andas en Sus caminos. (Deuteronomio 28:9)

Otras publicaciones relacionadas con "Deuteronomio 28:6":

Dr. Roberto Miranda
La persona que agrada a Dios siempre será bendecida
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda explica cómo la persona que agrada a Dios siempre será bendecida, incluso en medio de pruebas y dificultades. Se habla de la prosperidad material como una promesa de la bendición de Dios, y se destaca la importancia del temor a Jehová y la obediencia.


Charles Spurgeon
Personas favorecidas
En este artículo, Charles Spurgeon reflexiona sobre la importancia de tener un corazón recto para poder disfrutar del favor de Dios y la comunión con Él. El salmista anhela vivir en la presencia de Dios y bendecir siempre su nombre, incluso en momentos difíciles. Spurgeon nos invita a buscar la rectitud y la integridad en todas las cosas para poder disfrutar de la presencia y el favor de Dios.


Dr. Roberto Miranda
Las bendiciones vienen con la obediencia
Las bendiciones vienen con la obediencia: un análisis basado en la petición de Jabes y la vida de José.


Deuteronomio 28:6 - Referencia Cruzada

El SEÑOR guardará tu salida y tu entrada Desde ahora y para siempre. (Salmos 121:8)
Dame ahora sabiduría y conocimiento, para que pueda salir y entrar delante de este pueblo; porque, ¿quién podrá juzgar a este pueblo Tuyo tan grande?" (2 Crónicas 1:10)
y les dijo: "Hoy tengo 120 años; ya no puedo ir ni venir, y el SEÑOR me ha dicho: 'No pasarás este Jordán.' (Deuteronomio 31:2)
Conoce a Abner, hijo de Ner, que vino a engañarlo y saber de sus salidas y de sus entradas, y a enterarse de todo lo que usted hace." (2 Samuel 3:25)
que salga y entre delante de ellos, y que los haga salir y entrar a fin de que la congregación del SEÑOR no sea como ovejas que no tienen pastor." (Números 27:17)