Nueva Biblia Latinoamericana
y veas entre los cautivos una mujer hermosa, y la desees, y la tomes para ti por mujer, (Deuteronomio 21:11)
la traerás a tu casa, y ella se rasurará la cabeza y se cortará sus uñas. (Deuteronomio 21:12)
También se quitará el vestido de su cautiverio, permanecerá en tu casa y llorará por su padre y por su madre por todo un mes; después de eso podrás llegarte a ella y ser su marido, y ella será tu mujer. (Deuteronomio 21:13)
Pero si no te agrada, la dejarás ir adonde quiera. No la venderás por dinero, ni la maltratarás, porque la has humillado.
Si un hombre tiene dos mujeres, una amada y otra aborrecida, y tanto la amada como la aborrecida le han dado hijos, si el primogénito es de la aborrecida, (Deuteronomio 21:15)
el día que reparta lo que tiene entre sus hijos, no puede él hacer primogénito al hijo de la amada con preferencia al hijo de la aborrecida, que es el primogénito, (Deuteronomio 21:16)
sino que reconocerá al primogénito, al hijo de la aborrecida, dándole una porción doble de todo lo que tiene, porque él es el principio de su vigor; a él le pertenece el derecho de primogenitura. (Deuteronomio 21:17)

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Deuteronomio 21:14 - Referencia Cruzada

entonces el hombre que se acostó con ella dará cincuenta siclos de plata al padre de la joven, y ella será su mujer porque la ha violado. No podrá despedirla en todos sus días. (Deuteronomio 22:29)
entonces ustedes llevarán a los dos a la puerta de esa ciudad y los apedrearán hasta que mueran; la joven, porque no dio voces en la ciudad, y el hombre, porque ha violado a la mujer de su prójimo; así quitarás el mal de en medio de ti. (Deuteronomio 22:24)
Si alguien vende a su hija como sierva, ella no saldrá libre como salen los siervos. (Éxodo 21:7)
le pondrán una multa de 100 siclos (1.14 kilos) de plata, que darán al padre de la joven, porque denunció públicamente a una virgen de Israel. Y ella seguirá siendo su mujer; no podrá despedirla en todos sus días. (Deuteronomio 22:19)
Aquí está mi hija virgen y la concubina de él. Permítanme que las saque para que abusen de ellas y hagan con ellas lo que quieran, pero no cometan semejante ofensa contra este hombre." (Jueces 19:24)
Cuando la vio Siquem, hijo de Hamor Heveo, príncipe de la tierra, se la llevó y se acostó con ella y la violó. (Génesis 34:2)