Nueva Biblia Latinoamericana
Pero a ese profeta o a ese soñador de sueños se le dará muerte, por cuanto ha aconsejado rebelión contra el SEÑOR tu Dios, que te sacó de la tierra de Egipto y te redimió de casa de servidumbre, para apartarte del camino en el cual el SEÑOR tu Dios te mandó andar. Así quitarás el mal de en medio de ti. (Deuteronomio 13:5)
Si tu hermano, el hijo de tu madre, o tu hijo, o tu hija, o la mujer que amas, o tu amigo entrañable, te invita en secreto, diciendo: 'Vamos y sirvamos a otros dioses' (a quienes ni tú ni tus padres han conocido, (Deuteronomio 13:6)
de los dioses de los pueblos que te rodean, cerca o lejos de ti, de un término de la tierra al otro), (Deuteronomio 13:7)
no cederás ni le escucharás; y tu ojo no tendrá piedad de él, tampoco lo perdonarás ni lo encubrirás,
sino que ciertamente lo matarás; tu mano será la primera contra él para matarlo, y después la mano de todo el pueblo. (Deuteronomio 13:9)
Lo apedrearás hasta que muera porque él trató de apartarte del SEÑOR tu Dios que te sacó de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre (de esclavos). (Deuteronomio 13:10)
Entonces todo Israel oirá y temerá, y nunca volverá a hacer tal maldad en medio de ti. (Deuteronomio 13:11)

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Deuteronomio 13:8 - Referencia Cruzada

No tendrás otros dioses delante de Mí. (Éxodo 20:3)
Destruirás a todos los pueblos que el SEÑOR tu Dios te entregue; tu ojo no tendrá piedad de ellos; tampoco servirás a sus dioses, porque esto sería un tropiezo para ti. (Deuteronomio 7:16)
Pero si aun nosotros, o un ángel del cielo, les anunciara otro evangelio contrario al que les hemos anunciado, sea anatema (maldito). (Gálatas 1:8)
Pero oí que a los otros les dijo: "Pasen por la ciudad en pos de él y hieran; no tenga piedad su ojo, no perdonen. (Ezequiel 9:5)
Hijo mío, si los pecadores te quieren seducir, No consientas. (Proverbios 1:10)
No tendrás piedad de él; sino que limpiarás de Israel la sangre del inocente, para que te vaya bien. (Deuteronomio 19:13)
Hijos, aléjense de los ídolos. (1 Juan 5:21)
Por tanto, ¡vivo Yo!,' declara el Señor DIOS, 'que por haber profanado Mi santuario con todos tus ídolos detestables y con todas tus abominaciones, Yo me retiraré, Mi ojo no tendrá piedad y tampoco perdonaré. (Ezequiel 5:11)