Nueva Biblia Latinoamericana
Sin embargo, el primogénito de los animales, que por su primogenitura pertenece al SEÑOR, nadie puede consagrarlo; ya sea buey u oveja, es del SEÑOR. (Levítico 27:26)
Pero si está entre los animales inmundos, entonces lo redimirá conforme a tu valuación, y le añadirá a ella una quinta parte; pero si no es redimido, será vendido conforme a tu valuación. (Levítico 27:27)
Sin embargo, cualquier cosa dedicada que alguien separe para el SEÑOR de lo que posee, sea hombre o animal, o campos de su propiedad, no se venderá ni redimirá. Toda cosa dedicada es santísima al SEÑOR. (Levítico 27:28)
Ninguna persona que haya sido dedicada como anatema será redimida; ciertamente se le dará muerte.
Así pues, todo el diezmo de la tierra, de la semilla de la tierra o del fruto del árbol, es del SEÑOR; es cosa consagrada al SEÑOR. (Levítico 27:30)
Y si un hombre quiere redimir parte de su diezmo, le añadirá la quinta parte. (Levítico 27:31)
Todo diezmo del ganado o del rebaño, o sea, de todo lo que pasa debajo del cayado, la décima cabeza será cosa consagrada al SEÑOR. (Levítico 27:32)

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Levítico 27:29 - Referencia Cruzada

Entonces Israel hizo un voto al SEÑOR y dijo: "Si en verdad entregas a este pueblo en mis manos, yo destruiré por completo sus ciudades." (Números 21:2)
y que el SEÑOR te envió en una misión, y te dijo: 'Ve, y destruye por completo a los pecadores, los Amalecitas, y lucha contra ellos hasta que sean exterminados?' (1 Samuel 15:18)