Sino que por ellos Me acordaré del pacto con sus antepasados, que Yo saqué de la tierra de Egipto a la vista de las naciones, para ser su Dios. Yo soy el SEÑOR.'"
(Levítico 26:45)
Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que el SEÑOR estableció entre El y los Israelitas por medio de Moisés en el Monte Sinaí.
(Levítico 26:46)
El SEÑOR habló de nuevo a Moisés:
(Levítico 27:1)
Di a los Israelitas: 'Cuando un hombre haga un voto difícil de cumplir, él será evaluado según tu valuación de personas pertenecientes al SEÑOR.
Si tu valuación es de varón de veinte hasta sesenta años, entonces tu valuación será de cincuenta siclos (570 gramos) de plata, según el siclo del santuario.
(Levítico 27:3)
O si es de una mujer, tu valuación será de treinta siclos.
(Levítico 27:4)
Si es una persona de cinco hasta veinte años, entonces tu valuación será de veinte siclos para un varón y de diez siclos para una mujer.
(Levítico 27:5)
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Levítico 27:2 - Referencia Cruzada
Habla a los Israelitas, y diles: 'El hombre o la mujer que haga un voto especial, el voto de Nazareo, para dedicarse al SEÑOR,
(Números 6:2)
Al cabo de los dos meses ella regresó a su padre, que cumplió con ella conforme al voto que había hecho; y ella no tuvo relaciones con ningún hombre. Y se hizo costumbre en Israel,
(Jueces 11:39)
Por lo cual yo también lo he dedicado al SEÑOR. Todos los días de su vida estará dedicado al SEÑOR." Y adoró allí al SEÑOR.
(1 Samuel 1:28)
Entonces Israel hizo un voto al SEÑOR y dijo: "Si en verdad entregas a este pueblo en mis manos, yo destruiré por completo sus ciudades."
(Números 21:2)
Entonces hizo voto y dijo: "Oh SEÑOR de los ejércitos, si Te dignas mirar la aflicción de Tu sierva, Te acuerdas de mí y no Te olvidas de Tu sierva, sino que das un hijo a Tu sierva, yo lo dedicaré al SEÑOR por todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza."
(1 Samuel 1:11)
Entonces Jacob hizo un voto, diciendo: "Si Dios está conmigo y me guarda en este camino en que voy, y me da alimento para comer y ropa para vestir,
(Génesis 28:20)
Cuando haces un voto a Dios, no tardes en cumplirlo, porque El no se deleita en los necios. El voto que haces, cúmplelo.
(Eclesiastés 5:4)
Asimismo, si una mujer hace un voto al SEÑOR, y se impone una obligación en su juventud estando en casa de su padre,
(Números 30:3)
Cuando hagas un voto al SEÑOR tu Dios, no tardarás en pagarlo, porque el SEÑOR tu Dios ciertamente te lo reclamará, y sería pecado en ti si no lo cumples.
(Deuteronomio 23:21)
Y Jefté hizo un voto al SEÑOR, y dijo: "Si en verdad entregas en mis manos a los Amonitas,
(Jueces 11:30)