Así el sacerdote que es ungido y ordenado para ministrar como sacerdote en lugar de su padre hará expiación: se pondrá las vestiduras de lino, las vestiduras sagradas,
(Levítico 16:32)
y hará expiación por el santo santuario; hará expiación también por la tienda de reunión y por el altar. Además hará expiación por los sacerdotes y por todo el pueblo de la asamblea.
(Levítico 16:33)
Ustedes tendrán esto por estatuto perpetuo para hacer expiación por los Israelitas, por todos sus pecados, una vez cada año." Tal como el SEÑOR lo ordenó a Moisés, así lo hizo.
(Levítico 16:34)
Entonces el SEÑOR habló a Moisés:
Di a Aarón y a sus hijos, y a todos los Israelitas: 'Esto es lo que el SEÑOR ha ordenado:
(Levítico 17:2)
Cualquier hombre de la casa de Israel que degüelle un buey, un cordero o una cabra en el campamento, o el que lo degüelle fuera del campamento,
(Levítico 17:3)
sin llevarlo a la puerta de la tienda de reunión para presentarlo como una ofrenda al SEÑOR, delante del tabernáculo del SEÑOR, ese hombre será culpable de la sangre. Ha derramado sangre y ese hombre será exterminado de entre su pueblo.
(Levítico 17:4)
