Nueva Biblia Latinoamericana
Tú crees que Dios es uno (que hay un solo Dios). Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan. (Santiago 2:19)
Pero, ¿estás dispuesto a admitir (¿quieres saber), oh hombre vano (necio), que la fe sin obras es estéril? (Santiago 2:20)
¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? (Santiago 2:21)
Ya ves que la fe actuaba juntamente con sus obras, y como resultado de las obras, la fe fue perfeccionada;
y se cumplió la Escritura que dice: "Y ABRAHAM CREYO A DIOS Y LE FUE CONTADO POR JUSTICIA," y fue llamado amigo de Dios. (Santiago 2:23)
Ustedes ven que el hombre es justificado por las obras y no sólo por la fe. (Santiago 2:24)
Y de la misma manera, ¿no fue la ramera Rahab también justificada por las obras cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro camino? (Santiago 2:25)

Otras publicaciones relacionadas con "Santiago 2:22":

Dr. Roberto Miranda
Romanos 4 - Como funciona la fe?
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de creer en Dios y tener fe en Él. Él usa los ejemplos de Zacarías y María en el nacimiento de Juan el Bautista y Jesús para demostrar cómo la fe puede llevar a la bendición. También habla sobre cómo la fe se cultiva a través de la lectura de la Palabra de Dios y al rodearse de personas que tienen fe.


Dr. Roberto Miranda
Ser fieles a Dios y ver que Él responde a nuestras necesidades
Consejos para ser fieles a Dios y recibir sus bendiciones a través de la acumulación de buenas obras y la productividad en nuestras vidas, para acercarnos al trono divino con confianza y autoridad.


Santiago 2:22 - Referencia Cruzada

Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión ni la incircuncisión significan nada, sino la fe que obra por amor. (Gálatas 5:6)
En esto se perfecciona el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio, pues como El es, así somos también nosotros en este mundo. (1 Juan 4:17)
teniendo presente sin cesar delante de nuestro Dios y Padre su obra de fe, su trabajo de amor y la firmeza (perseverancia) de su esperanza en nuestro Señor Jesucristo. (1 Tesalonicenses 1:3)
Pero el que guarda Su palabra, en él verdaderamente se ha perfeccionado el amor de Dios. En esto sabemos que estamos en El. (1 Juan 2:5)
Pero alguien dirá: "Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras." (Santiago 2:18)
Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía a su único hijo. (Hebreos 11:17)