y que la paciencia tenga su perfecto resultado, para que sean perfectos y completos, sin que nada les falte.
(Santiago 1:4)
Y si a alguno de ustedes le falta sabiduría, que se la pida a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.
(Santiago 1:5)
Pero que pida con fe, sin dudar. Porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada por el viento y echada de una parte a otra.
(Santiago 1:6)
No piense, pues, ese hombre, que recibirá cosa alguna del Señor,
siendo hombre de doble ánimo (que duda), inestable en todos sus caminos.
(Santiago 1:8)
Pero que el hermano de condición humilde se gloríe en su alta posición,
(Santiago 1:9)
y el rico en su humillación, pues él pasará como la flor de la hierba.
(Santiago 1:10)
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Santiago 1:7 - Referencia Cruzada
El sacrificio de los impíos es abominación al SEÑOR, Pero la oración de los rectos es Su deleite.
(Proverbios 15:8)
Piden y no reciben, porque piden con malos propósitos, para gastarlo en sus placeres.
(Santiago 4:3)
Cuando extiendan sus manos, Esconderé Mis ojos de ustedes. Sí, aunque multipliquen las oraciones, No escucharé. Sus manos están llenas de sangre.
(Isaías 1:15)
Dicen: '¿Por qué hemos ayunado, y Tú no lo ves? ¿Por qué nos hemos humillado, y Tú no haces caso?' Pero en el día de su ayuno buscan su conveniencia Y oprimen a todos sus trabajadores.
(Isaías 58:3)
El sacrificio de los impíos es abominación, Cuánto más trayéndolo con mala intención.
(Proverbios 21:27)