Luego degolló el buey y el carnero, el sacrificio de las ofrendas de paz que era por el pueblo; y los hijos de Aarón le dieron la sangre y él la roció sobre el altar, por todos los lados. (Levítico 9:18)

En cuanto a los pedazos de grasa del buey y del carnero, la cola gorda, la grasa que cubre las entrañas , los riñones y el lóbulo del hígado, (Levítico 9:19)

los pusieron sobre los pechos de los animales sacrificados; y él quemó los pedazos de sebo sobre el altar. (Levítico 9:20)

Pero Aarón presentó los pechos y la pierna derecha como ofrenda mecida delante del SEÑOR, tal como Moisés había ordenado.

Entonces Aarón alzó sus manos hacia el pueblo y lo bendijo, y después de ofrecer la ofrenda por el pecado, el holocausto y las ofrendas de paz, descendió. (Levítico 9:22)

Moisés y Aarón entraron en la tienda de reunión, y cuando salieron y bendijeron al pueblo, la gloria del SEÑOR apareció a todo el pueblo. (Levítico 9:23)

Y salió fuego de la presencia del SEÑOR que consumió el holocausto y los pedazos de grasa sobre el altar. Al verlo, todo el pueblo aclamó y se postró rostro en tierra. (Levítico 9:24)

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Levítico 9:21 - Referencia Cruzada

El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve (que ministra), que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén. (1 Pedro 4:11)

Sus propias manos traerán ofrendas encendidas al SEÑOR. Traerá la grasa con el pecho, para que el pecho sea presentado como ofrenda mecida delante del SEÑOR. (Levítico 7:30)

Entonces tomarás el pecho del carnero de la consagración de Aarón, y lo mecerás como ofrenda mecida delante del SEÑOR. Esa será tu porción. (Éxodo 29:26)

Lo pondrás todo en las manos de Aarón y en las manos de sus hijos. Lo mecerás como ofrenda mecida delante del SEÑOR. (Éxodo 29:24)

Y ustedes no comerán sangre, ni de ave ni de animal, en ningún lugar en que habiten. (Levítico 7:26)

De repente apareció con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales, alabando a Dios y diciendo: (Lucas 2:13)

La grasa de un animal muerto y la grasa de un animal despedazado por las fieras podrá servir para cualquier uso, pero ciertamente no deben comerlo. (Levítico 7:24)

Y Me dijo: "Tú eres Mi siervo, Israel, En quien Ti mostraré Mi gloria." (Isaías 49:3)