King James Version
To whom God would make known what is the riches of the glory of this mystery among the Gentiles; which is Christ in you, the hope of glory:(Colosenses 1:27)
Whom we preach, warning every man, and teaching every man in all wisdom; that we may present every man perfect in Christ Jesus:(Colosenses 1:28)
Whereunto I also labour, striving according to his working, which worketh in me mightily.(Colosenses 1:29)
For I would that ye knew what great conflict I have for you, and for them at Laodicea, and for as many as have not seen my face in the flesh;
That their hearts might be comforted, being knit together in love, and unto all riches of the full assurance of understanding, to the acknowledgement of the mystery of God, and of the Father, and of Christ;(Colosenses 2:2)
In whom are hid all the treasures of wisdom and knowledge.(Colosenses 2:3)
And this I say, lest any man should beguile you with enticing words.(Colosenses 2:4)

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Colosenses 2:1 - Referencia Cruzada

He took his brother by the heel in the womb, and by his strength he had power with God: (Oseas 12:3)
My little children, of whom I travail in birth again until Christ be formed in you, (Gálatas 4:19)
Sorrowing most of all for the words which he spake, that they should see his face no more. And they accompanied him unto the ship. (Hechos 20:38)
Who in the days of his flesh, when he had offered up prayers and supplications with strong crying and tears unto him that was able to save him from death, and was heard in that he feared; (Hebreos 5:7)
For though I be absent in the flesh, yet am I with you in the spirit, joying and beholding your order, and the stedfastness of your faith in Christ. (Colosenses 2:5)
But even after that we had suffered before, and were shamefully entreated, as ye know, at Philippi, we were bold in our God to speak unto you the gospel of God with much contention. (1 Tesalonicenses 2:2)
Whereunto I also labour, striving according to his working, which worketh in me mightily. (Colosenses 1:29)
And being in an agony he prayed more earnestly: and his sweat was as it were great drops of blood falling down to the ground. (Lucas 22:44)
Who now rejoice in my sufferings for you, and fill up that which is behind of the afflictions of Christ in my flesh for his body's sake, which is the church: (Colosenses 1:24)
Whom having not seen, ye love; in whom, though now ye see him not, yet believing, ye rejoice with joy unspeakable and full of glory: (1 Pedro 1:8)
Having the same conflict which ye saw in me, and now hear to be in me. (Filipenses 1:30)
And now, behold, I know that ye all, among whom I have gone preaching the kingdom of God, shall see my face no more. (Hechos 20:25)
And unto the angel of the church of the Laodiceans write; These things saith the Amen, the faithful and true witness, the beginning of the creation of God; (Apocalipsis 3:14)
Epaphras, who is one of you, a servant of Christ, saluteth you, always labouring fervently for you in prayers, that ye may stand perfect and complete in all the will of God. (Colosenses 4:12)
And Rachel said, With great wrestlings have I wrestled with my sister, and I have prevailed: and she called his name Naphtali. (Génesis 30:8)
Saying, I am Alpha and Omega, the first and the last: and, What thou seest, write in a book, and send it unto the seven churches which are in Asia; unto Ephesus, and unto Smyrna, and unto Pergamos, and unto Thyatira, and unto Sardis, and unto Philadelphia, and unto Laodicea. (Apocalipsis 1:11)
Salute the brethren which are in Laodicea, and Nymphas, and the church which is in his house. (Colosenses 4:15)
And Jacob was left alone; and there wrestled a man with him until the breaking of the day. (Génesis 32:24)