Nueva Biblia Latinoamericana
Ruego a Evodia y a Síntique, que vivan en armonía (que sean del mismo sentir) en el Señor. (Filipenses 4:2)
En verdad, fiel compañero, también te ruego que ayudes a estas mujeres que han compartido mis luchas en la causa del evangelio, junto con Clemente y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el Libro de la Vida. (Filipenses 4:3)
Regocíjense en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocíjense! (Filipenses 4:4)
La bondad de ustedes sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios. (Filipenses 4:6)
Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús. (Filipenses 4:7)
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto mediten. (Filipenses 4:8)

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Filipenses 4:5 - Referencia Cruzada

Pues ustedes mismos saben perfectamente que el día del Señor vendrá así como un ladrón en la noche; (1 Tesalonicenses 5:2)
Así que, en efecto, es ya un fallo entre ustedes el hecho de que tengan litigios entre sí. ¿Por qué no sufren mejor la injusticia? ¿Por qué no ser mejor defraudados? (1 Corintios 6:7)
no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos unos a otros , y mucho más al ver que el día se acerca. (Hebreos 10:25)
Sea el carácter de ustedes sin avaricia, contentos con lo que tienen, porque El mismo ha dicho: "NUNCA TE DEJARE NI TE DESAMPARARE," (Hebreos 13:5)
PORQUE DENTRO DE MUY POCO TIEMPO, EL QUE HA DE VENIR VENDRA Y NO TARDARA. (Hebreos 10:37)
Por eso les digo, no se preocupen por su vida, qué comerán o qué beberán; ni por su cuerpo, qué vestirán. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que la ropa? (Mateo 6:25)
Pero si aquel siervo es malo, y dice en su corazón: 'Mi señor tardará'; (Mateo 24:48)
Sean también ustedes pacientes. Fortalezcan sus corazones, porque la venida del Señor está cerca. (Santiago 5:8)
Y todo el que compite en los juegos se abstiene de todo. Ellos lo hacen para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible. (1 Corintios 9:25)
Pero esto digo, hermanos: el tiempo ha sido acortado; de modo que de ahora en adelante los que tienen mujer sean como si no la tuvieran; (1 Corintios 7:29)
procurando saber qué persona o tiempo indicaba el Espíritu de Cristo dentro de ellos, al predecir los sufrimientos de Cristo y las glorias que seguirían. (1 Pedro 1:11)
Por tanto, Yo vengo pronto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro." (Apocalipsis 22:7)
Estén alerta, no sea que sus corazones se carguen con disipación, embriaguez y con las preocupaciones de la vida, y aquel día venga súbitamente sobre ustedes como un lazo; (Lucas 21:34)
El que testifica de estas cosas dice: "Sí, vengo pronto." Amén. Ven, Señor Jesús. (Apocalipsis 22:20)
Pero el fin de todas las cosas se acerca. Sean pues ustedes prudentes y de espíritu sobrio para la oración. (1 Pedro 4:7)
Pero Yo les digo: no resistan al que es malo; antes bien, a cualquiera que te abofetee en la mejilla derecha, vuélvele también la otra. (Mateo 5:39)
Al que te hiera en la mejilla, preséntale también la otra; y al que te quite la capa, no le niegues tampoco la túnica. (Lucas 6:29)
Por tanto, si la comida hace que mi hermano caiga en pecado, no comeré carne jamás, para no hacer pecar a mi hermano. (1 Corintios 8:13)
que no sean sacudidos fácilmente en su modo de pensar, ni se alarmen, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera de nosotros, en el sentido de que el día del Señor ha llegado. (2 Tesalonicenses 2:2)
Pero, amados, no ignoren esto: que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. (2 Pedro 3:8)
A Sus discípulos Jesús les dijo: "Por eso les digo que no se preocupen por su vida, qué comerán; ni por su cuerpo, qué vestirán. (Lucas 12:22)
Que no injurien a nadie, que no sean contenciosos, sino amables, mostrando toda consideración para con todos los hombres. (Tito 3:2)
Por tanto, no se preocupen por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidará de sí mismo. Bástenle a cada día sus propios problemas. (Mateo 6:34)