Nueva Biblia Latinoamericana
Y no somos como Moisés, que ponía un velo sobre su rostro para que los Israelitas no fijaran su vista en el fin de aquello que había de desvanecerse. (2 Corintios 3:13)
Pero el entendimiento de ellos se endureció. Porque hasta el día de hoy, en la lectura del antiguo pacto (testamento) el mismo velo permanece sin alzarse, pues sólo en Cristo es quitado. (2 Corintios 3:14)
Y hasta el día de hoy, cada vez que se lee a Moisés, un velo está puesto sobre sus corazones. (2 Corintios 3:15)
Pero cuando alguien se vuelve al Señor, el velo es quitado.
Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, hay libertad. (2 Corintios 3:17)
Pero todos nosotros, con el rostro descubierto, contemplando como en un espejo la gloria del Señor, estamos siendo transformados en la misma imagen de gloria en gloria, como por el Señor, el Espíritu. (2 Corintios 3:18)
Por tanto, puesto que tenemos este ministerio, según hemos recibido misericordia, no desfallecemos. (2 Corintios 4:1)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Corintios 3:16":

Samuel Acevedo
Velos que nos prohíben ver la gloria de Dios
Artículo sobre cómo los velos nos impiden ver la gloria de Dios y cómo acercarnos a Él para experimentar su presencia y ser transformados por su Espíritu.


Gregory Bishop
Reflejando la gloria de Dios
En este sermón, el pastor habla sobre la diferencia entre hacer resoluciones de Año Nuevo y experimentar una verdadera transformación revolucionaria a través del poder del Espíritu Santo de Dios. También habla sobre el significado del bautismo y cómo Dios tiene un proyecto en nuestras vidas para hacernos como Jesús.


2 Corintios 3:16 - Referencia Cruzada

Escrito está en los profetas: 'Y TODOS SERAN ENSEÑADOS POR DIOS.' Todo el que ha oído y aprendido del Padre, viene a Mí. (Juan 6:45)
En los postreros días, cuando estés angustiado y todas esas cosas te sobrevengan, volverás al SEÑOR tu Dios y escucharás Su voz. (Deuteronomio 4:30)
Y también ellos, si no permanecen en su incredulidad, serán injertados, pues poderoso es Dios para injertarlos de nuevo. (Romanos 11:23)
En aquel día los sordos oirán las palabras de un libro, Y desde la oscuridad y las tinieblas los ojos de los ciegos verán. (Isaías 29:18)
Pero siempre que Moisés entraba a la presencia del SEÑOR para hablar con El, se quitaba el velo hasta que salía. Siempre que él salía, decía a los Israelitas lo que el SEÑOR le había ordenado. (Éxodo 34:34)
si obedeces a la voz del SEÑOR tu Dios, guardando Sus mandamientos y Sus estatutos que están escritos en este Libro de la Ley, y si te vuelves al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma. (Deuteronomio 30:10)
Todos tus hijos serán enseñados por el SEÑOR, Y grande será el bienestar de tus hijos. (Isaías 54:13)
Examinemos nuestros caminos y escudriñémoslos, Y volvamos al SEÑOR. (Lamentaciones 3:40)
No tendrán que enseñar más cada uno a su prójimo y cada cual a su hermano, diciéndole: 'Conoce al SEÑOR,' porque todos Me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande," declara el SEÑOR, "pues perdonaré su maldad, y no recordaré más su pecado." (Jeremías 31:34)
Y destruirá en este monte la cobertura que cubre todos los pueblos, El velo que está extendido sobre todas las naciones. (Isaías 25:7)
Porque por muchos días los Israelitas quedarán sin rey y sin príncipe, sin sacrificio y sin pilar sagrado , sin efod y sin ídolos domésticos. (Oseas 3:4)
Porque no quiero, hermanos, que ignoren este misterio, para que no sean sabios en su propia opinión: que a Israel le ha acontecido un endurecimiento parcial hasta que haya entrado la plenitud de los Gentiles. (Romanos 11:25)