y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes es falsa; todavía están en sus pecados.
(1 Corintios 15:17)Entonces también los que han dormido (han muerto) en Cristo están perdidos.
(1 Corintios 15:18)Si hemos esperado en Cristo para esta vida solamente, somos, de todos los hombres, los más dignos de lástima.
(1 Corintios 15:19)Pero ahora Cristo ha resucitado de entre los muertos, primicias de los que durmieron (murieron).
Porque ya que la muerte entró por un hombre, también por un hombre vino la resurrección de los muertos.
(1 Corintios 15:21)Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.
(1 Corintios 15:22)Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo en Su venida.
(1 Corintios 15:23)Otras publicaciones relacionadas con "1 Corintios 15:20":
1 Corintios 15:20 - Referencia Cruzada
Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo en Su venida.
(1 Corintios 15:23)Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien según Su gran misericordia, nos ha hecho nacer de nuevo a una esperanza viva, mediante la resurrección de Jesucristo de entre los muertos,
(1 Pedro 1:3)Luego se apareció a más de 500 hermanos a la vez, la mayoría de los cuales viven aún, pero algunos ya duermen (murieron).
(1 Corintios 15:6)Pero si el Espíritu de Aquél que resucitó a Jesús de entre los muertos habita en ustedes, el mismo que resucitó a Cristo Jesús de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de Su Espíritu que habita en ustedes.
(Romanos 8:11)que el Cristo (el Mesías) había de padecer, y que por motivo de Su resurrección de entre los muertos, El debía ser el primero en proclamar luz tanto al pueblo Judío como a los Gentiles."
(Hechos 26:23)El es también la cabeza del cuerpo que es la iglesia. El es el principio, el primogénito de entre los muertos, a fin de que El tenga en todo la primacía.
(Colosenses 1:18)y de parte de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y nos libertó de nuestros pecados con Su sangre,
(Apocalipsis 1:5)