Nueva Biblia Latinoamericana
que el Cristo (el Mesías) había de padecer, y que por motivo de Su resurrección de entre los muertos, El debía ser el primero en proclamar luz tanto al pueblo Judío como a los Gentiles." (Hechos 26:23)
Mientras Pablo decía esto en su defensa, Festo dijo a gran voz: "¡Pablo, estás loco! ¡Tu mucho saber te está haciendo perder la cabeza!" (Hechos 26:24)
Pero Pablo le respondió: "No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. (Hechos 26:25)
Porque el rey entiende estas cosas, y también le hablo con confianza, porque estoy persuadido de que él no ignora nada de esto; pues esto no se ha hecho en secreto.
Rey Agripa, ¿cree usted en los profetas? Yo sé que cree." (Hechos 26:27)
Entonces Agripa II le dijo a Pablo: "En poco tiempo me persuadirás a que me haga Cristiano." (Hechos 26:28)
Y Pablo contestó: " Quisiera Dios que, ya fuera en poco tiempo o en mucho, no sólo usted, sino también todos los que hoy me oyen, llegaran a ser tal como yo soy, a excepción de estas cadenas." (Hechos 26:29)

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Hechos 26:26 - Referencia Cruzada

Aunque el Señor les ha dado pan de escasez y agua de opresión, El, tu Maestro, no se esconderá más, sino que tus propios ojos contemplarán a tu Maestro. (Isaías 30:20)
Entonces echaron mano a los apóstoles y los pusieron en una cárcel pública. (Hechos 5:18)
Con respecto a todo aquello de que los Judíos me acusan, me considero afortunado, oh rey Agripa, de poder presentar hoy mi defensa delante de usted, (Hechos 26:2)
Entonces Agripa II dijo a Festo: "A mí también me gustaría oír al hombre." "Mañana lo oirás," dijo Festo. (Hechos 25:22)
Y tejiendo una corona de espinas, la pusieron sobre Su cabeza, y una caña en Su mano derecha; y arrodillándose delante de El, Le hacían burla, diciendo: "¡Salve, Rey de los Judíos!" (Mateo 27:29)
¿Qué haremos con estos hombres?" decían. "Porque el hecho de que un milagro (una señal) notable ha sido realizado por medio de ellos es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarlo. (Hechos 4:16)
Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos (unánimes) en un mismo lugar, (Hechos 2:1)
Pero decían: "No durante la fiesta, para que no haya un tumulto en el pueblo." (Mateo 26:5)