Al surgir un gran altercado, el comandante tuvo temor de que Pablo fuera despedazado por ellos, y ordenó que las tropas descendieran, lo sacaran de entre ellos a la fuerza y lo llevaran al cuartel.
(Hechos 23:10)A la noche siguiente el Señor se le apareció a Pablo y le dijo: "Ten ánimo, porque como has testificado fielmente de Mi causa en Jerusalén, así has de testificar también en Roma."
(Hechos 23:11)Cuando se hizo de día, los Judíos tramaron una conspiración y se comprometieron bajo juramento, diciendo que no comerían ni beberían hasta que hubieran matado a Pablo.
(Hechos 23:12)Los que tramaron este plan eran más de cuarenta hombres,
los cuales fueron a los principales sacerdotes y a los ancianos y dijeron: "Nos hemos comprometido bajo solemne juramento a no probar nada hasta que hayamos matado a Pablo.
(Hechos 23:14)Ahora pues, ustedes y el Concilio, avisen al comandante para que lo haga comparecer ante ustedes, como si quisieran hacer una investigación más minuciosa para resolver su caso. Nosotros por nuestra parte estamos listos para matarlo antes de que llegue."
(Hechos 23:15)Pero el hijo de la hermana de Pablo se enteró de la emboscada, y fue y entró al cuartel y dio aviso a Pablo.
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Hechos 23:13 - Referencia Cruzada
Alguien dio aviso a David: "Ahitofel está entre los conspiradores con Absalón." Y David dijo: "Oh SEÑOR, Te ruego, haz necio el consejo de Ahitofel."
(2 Samuel 15:31)Y Absalón envió por Ahitofel el Gilonita, consejero de David, desde Gilo su ciudad, cuando ofrecía los sacrificios. Y la conspiración se hacía fuerte porque constantemente aumentaba la gente que seguía a Absalón.
(2 Samuel 15:12)Los expulsarán de las sinagogas; pero viene la hora cuando cualquiera que los mate pensará que así rinde un servicio a Dios.
(Juan 16:2)