Nueva Biblia Latinoamericana
Sus discípulos Le dijeron: "Ahora hablas claramente y no usas lenguaje figurado (un proverbio). (Juan 16:29)
Ahora entendemos que Tú sabes todas las cosas, y no necesitas que nadie Te pregunte; por esto creemos que Tú viniste de Dios." (Juan 16:30)
Jesús les respondió: "¿Ahora creen? (Juan 16:31)
Miren, la hora viene, y ya ha llegado, en que serán esparcidos, cada uno por su lado, y Me dejarán solo; y sin embargo no estoy solo, porque el Padre está conmigo.
Estas cosas les he hablado para que en Mí tengan paz. En el mundo tienen tribulación; pero confíen, Yo he vencido al mundo." (Juan 16:33)
Estas cosas habló Jesús, y alzando los ojos al cielo, dijo: "Padre, la hora ha llegado; glorifica a Tu Hijo, para que el Hijo Te glorifique a Ti, (Juan 17:1)
por cuanto Le diste autoridad sobre todo ser humano, para que El dé vida eterna a todos los que Le has dado. (Juan 17:2)

Otras publicaciones relacionadas con "Juan 16:32":

Brandt Gillespie
¿Quieres la verdad? ¡Escuche a Jesús!
En el interrogatorio de Jesús ante Pilato, Jesús afirmó que su reino no es de este mundo y que vino a testificar de la verdad. En un mundo donde los líderes buscan establecer sus propios reinos, debemos recordar la verdad eterna de Jesús y acercarnos a Él como el Camino, la Verdad y la Vida.


Dr. Roberto Miranda
Exaltar el nombre de Jesús
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda habla sobre la importancia de exaltar y glorificar el nombre de Jesús, su autoridad divina y su relación íntima con el Padre. También enfatiza la necesidad de mantenernos fieles a la Palabra de Dios y buscar una relación íntima con Él a través de la oración y el estudio de la Biblia.


Juan 16:32 - Referencia Cruzada

En verdad les digo que viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que oigan vivirán. (Juan 5:25)
Jesús les respondió: "Ha llegado la hora para que el Hijo del Hombre sea glorificado. (Juan 12:23)
Estas cosas les he hablado en lenguaje figurado (en proverbios); viene el tiempo cuando no les hablaré más en lenguaje figurado, sino que les hablaré del Padre claramente. (Juan 16:25)
Despierta, espada, contra Mi pastor, Y contra el hombre compañero Mío," Declara el SEÑOR de los ejércitos. "Hiere al Pastor y se dispersarán las ovejas, Y volveré Mi mano contra los pequeños. (Zacarías 13:7)
Jesús le dijo: "Mujer, cree lo que te digo: la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adorarán ustedes al Padre. (Juan 4:21)
Ofrecí Mi espalda a los que Me herían, Y Mis mejillas a los que Me arrancaban la barba; No escondí Mi rostro de injurias y salivazos. (Isaías 50:6)
Pero si Yo juzgo, Mi juicio es verdadero; porque no soy Yo solo, sino Yo y el Padre que Me envió. (Juan 8:16)
No se queden asombrados de esto, porque viene la hora en que todos los que están en los sepulcros oirán Su voz, (Juan 5:28)
Y Aquél que Me envió está conmigo; no Me ha dejado solo, porque Yo siempre hago lo que Le agrada." (Juan 8:29)
Los discípulos entonces se fueron de nuevo a sus casas. (Juan 20:10)
Y abandonando a Jesús, todos huyeron. (Marcus 14:50)
Entonces Jesús les dijo: "Esta noche todos ustedes se apartarán por causa de Mí, pues escrito está: 'HERIRE AL PASTOR, Y LAS OVEJAS DEL REBAÑO SE DISPERSARAN.' (Mateo 26:31)
Pero todo esto ha sucedido para que se cumplan las Escrituras de los profetas." Entonces todos los discípulos Lo abandonaron y huyeron. (Mateo 26:56)
Jesús les dijo: "Todos ustedes se apartarán, porque escrito está: 'HERIRE AL PASTOR, Y LAS OVEJAS SE DISPERSARAN.' (Marcus 14:27)
Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que Lo adoren. (Juan 4:23)
En mi primera defensa nadie estuvo a mi lado, sino que todos me abandonaron; que no se les tenga en cuenta. (2 Timoteo 4:16)
Los expulsarán de las sinagogas; pero viene la hora cuando cualquiera que los mate pensará que así rinde un servicio a Dios. (Juan 16:2)
¿No crees que Yo estoy en el Padre y el Padre en Mí? Las palabras que Yo les digo, no las hablo por Mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en Mí es el que hace las obras. (Juan 14:10)
Y Saulo (Pablo) estaba de completo acuerdo con ellos en su muerte. En aquel día se desató una gran persecución en contra de la iglesia en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y Samaria, excepto los apóstoles. (Hechos 8:1)