Entonces él les contestó: "Si es pecador, no lo sé; una cosa sé: que yo era ciego y ahora veo."
(Juan 9:25)
Ellos volvieron a preguntarle: "¿Qué te hizo? ¿Cómo te abrió los ojos?"
(Juan 9:26)
El les contestó: "Ya les dije y no escucharon; ¿por qué quieren oírlo otra vez? ¿Es que también ustedes quieren hacerse discípulos suyos?"
(Juan 9:27)
Entonces lo insultaron, y le dijeron: "Tú eres discípulo de ese hombre; pero nosotros somos discípulos de Moisés.
Nosotros sabemos que Dios habló a Moisés, pero en cuanto a Este, no sabemos de dónde es."
(Juan 9:29)
El hombre les respondió: "Pues en esto hay algo asombroso, que ustedes no sepan de dónde es, y sin embargo, a mí me abrió los ojos.
(Juan 9:30)
Sabemos que Dios no oye a los pecadores; pero si alguien teme a Dios y hace Su voluntad, a éste oye.
(Juan 9:31)
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Juan 9:28 - Referencia Cruzada
Escúchenme, ustedes que conocen la justicia, Pueblo en cuyo corazón está Mi ley. No teman el oprobio del hombre, Ni se desalienten a causa de sus ultrajes.
(Isaías 51:7)
Nos agotamos trabajando con nuestras propias manos. Cuando nos ultrajan (insultan), bendecimos. Cuando somos perseguidos, lo soportamos.
(1 Corintios 4:12)
ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios.
(1 Corintios 6:10)
Bienaventurados serán cuando los insulten y persigan, y digan todo género de mal contra ustedes falsamente, por causa de Mí.
(Mateo 5:11)
¿No les dio Moisés la Ley, y sin embargo ninguno de ustedes la cumple? ¿Por qué Me quieren matar?"
(Juan 7:19)
Ellos le respondieron: "Tú naciste enteramente en pecados, ¿y tú nos enseñas a nosotros?" Y lo echaron fuera.
(Juan 9:34)
y quien cuando Lo ultrajaban, no respondía ultrajando. Cuando padecía, no amenazaba, sino que se encomendaba a Aquél que juzga con justicia.
(1 Pedro 2:23)
Entonces los Fariseos les contestaron: "¿Es que también ustedes se han dejado engañar?
(Juan 7:47)
Pero si tú, que llevas el nombre de Judío y te apoyas en la Ley; que te glorías en Dios
(Romanos 2:17)
No piensen que Yo los acusaré delante del Padre; el que los acusa es Moisés, en quien ustedes han puesto su esperanza.
(Juan 5:45)
Los que pasaban Lo injuriaban, meneando la cabeza
(Mateo 27:39)
Entonces, en secreto persuadieron a algunos hombres para que dijeran: "Le hemos oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios."
(Hechos 6:11)